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Santiago: Domingo 06 de octubre del 2024 | Actualizado 07:31
BOGOTÁ.- El ministro del Interior de Colombia, Juan Fernando Cristo, dijo hoy que es "obvio" que las FARC quieran constituirse como un partido político "sin armas" luego de un eventual acuerdo de paz, en respuesta a declaraciones del grupo sobre su deseo de iniciar un "tránsito" hacia el ejercicio democrático.
"Si se renuncia a las armas por parte de las FARC, si las armas se dejan, es obvio que quienes quieren expresar unas ideas y defenderlas sin armas dentro de la democracia colombiana se constituyan como partido político", expresó el ministro.
Desde Tunja, capital del departamento de Boyacá (centro), Cristo subrayó, sin embargo, que Colombia no puede volver a tener "la mezcla explosiva y perversa de armas y votos".
Asimismo, el jefe de la cartera del Interior consideró que "avanza por buen camino" el proceso de paz que el gobierno del presidente Juan Manuel Santos celebra en Cuba desde 2012 con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Cristo también defendió un proyecto de ley presentado el martes ante el Congreso para crear una comisión legislativa especial, así como darle al mandatario facultades extraordinarias, para implementar los eventuales acuerdos que se logren con las FARC.
Previamente, el jefe del equipo negociador de la guerrilla en La Habana, alias "Iván Márquez", dijo esta mañana que las FARC están listas "para abordar y discutir los procedimientos para el tránsito de organización alzada en armas a movimiento político abierto".
"Al respecto, hemos entregado a los plenipotenciarios del gobierno un paquete de propuestas básicas que esperan concreción", agregó "Márquez" al cierre de un nuevo ciclo de negociaciones.
El proceso de paz que completa casi tres años ya deja algunos acuerdos preliminares en materia de desarrollo agrario, participación en política de los guerrilleros que se desmovilicen y lucha conjunta contra el narcotráfico.
Desde el año pasado, las partes discuten el tema de las víctimas del conflicto armado, que en más de 50 años deja unos 220.000 muertos, casi cinco millones de desplazados y 45.000 desaparecidos.
Santos ha asegurado que lo que resta puede ser la fase más complicada del proceso, pues los temas que se avecinan son la justicia transicional, el acuerdo sobre el alto el fuego definitivo y la definición del mecanismo para refrendar los acuerdos.
