MADRID.- El jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, enumeró este martes la lista de riesgos que presenta el proyecto de los independentistas en Cataluña, aludiendo a la moneda, las pensiones, los bancos y la nacionalidad, a cinco días de unas elecciones cruciales.
Una Cataluña independiente "se iría fuera de la UE ¿Qué pasaría con las pensiones? (...) Hay muchas más pensiones que cotizantes ¿Qué pasaría con las entidades financieras, qué pasaría con sus depósitos, qué pasaría con la moneda?", dijo el Presidente.
Rajoy ha multiplicado las intervenciones en los medios y los mítines, a pocos días de los comicios regionales en Cataluña, las que su propio partido considera "históricos".
El Mandatario también aludió al riego de "inestabilidad" y de "tensiones" en el país.
Las elecciones del domingo, destinadas a renovar el parlamento regional catalán, son presentadas por los independentistas como un plebiscito a favor o en contra de la secesión.
El independentista Artur Mas, jefe del Gobierno catalán saliente, y sus aliados tanto de izquierdas como de derechas, consideran que si obtienen una mayoría absoluta de escaños dispondrán de un mandato para llevar a la región hacia la independencia, en un periodo máximo de 18 meses.
Este proceso destinado a declarar la independencia de Cataluña, responsable de una quinta parte del Producto Interno Bruto (PIB) español, "no tiene ningún valor jurídico, desde luego iríamos al Tribunal Constitucional y punto", afirmó Rajoy.
"Lo que es España lo tienen que decidir todos los españoles y no unos cuantos", reiteró, denunciando de paso la ausencia de programa por parte de Mas en materia de empleo o educación, y negándose a hablar del deseo de una mayoría de catalanes que, según los sondeos, reclaman un referéndum de autodeterminación similar a los organizados en las regiones canadiense de Quebec o británica de Escocia.
Si los independentistas no obtienen mayoría absoluta en el parlamento, Rajoy estaría dispuesto a cortarles el paso aliándose con los otros partidos favorables al mantenimiento de Cataluña en España, afirmó sin nombrarlos.
"Si fuera posible construir una alternativa frente a quien quiere liquidar a España, sería algo muy sensato y razonable", consideró.