Imagen del rescate de 72 personas mantenidas como rehenes por catorce terroristas del MRTA en la residencia del embajador de Japón en Lima (Perú).
LIMA.- El ex número dos del grupo armado guevarista Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA), Peter Cárdenas, recuperó su libertad el martes tras cumplir una condena de 25 años en prisión por el delito de terrorismo, informó el Instituto Nacional Penitenciario de Perú (INPE).
"Se ha cumplido con la pena y el INPE lo único que tiene que hacer es darle la libertad", dijo a la radio RPP el presidente del sistema de prisiones peruano, Julio Magán.
Peter Cárdenas Schulte, abandonó la cárcel de alta seguridad de la base naval en el puerto El Callao, al este de Lima, la misma donde cumplen sentencia de por vida el líder histórico del MRTA, Víctor Polay, y el jefe y fundador de Sendero Luminoso, Abimael Guzmán.
Cárdenas, que bordea los 65 años, se retiró acompañado por sus familiares y sin hacer declaraciones, según las autoridades penitenciarias que trataron de mantener en reserva la noticia.
Un tribunal de justicia lo había condenado a 25 años por los delitos de "terrorismo, terrorismo agravado y contra la fe pública" en tanto integrante de la cúpula del MRTA, una guerrilla que recurrió al secuestro de personalidades en la década de 1980 para financiar sus acciones armadas.
Cárdenas, quien usó el alias de "Camarada Alfonso" durante su militancia en el MRTA, estaba preso desde el 14 de abril de 1992 tras ser detenido por fuerzas de seguridad durante el gobierno de Alberto Fujimori (1990-2000). Debía salir libre en 2017 pero la justicia peruana le descontó 18 meses de prisión que cumplió entre 1988-1989.
El MRTA alcanzó fama internacional en 1996, cuando tomó por asalto la residencia del embajador de Japón en Lima, donde permaneció atrincherado más de cuatro meses con 72 rehenes en lo que constituye hasta ahora el secuestro masivo más prolongado en las Américas.
"Legalmente ya cumplió su pena, tiene que salir. No hay manera de retenerlo, pero todos tenemos que estar vigilantes", dijo por su lado el ministro del Interior, José Luis Pérez.
Pasado de terror
La puesta en libertad de Cárdenas confronta a Perú con su pasado inmediato de terror y violencia que vivió el país entre 1980 y el 2000, y que dejó más de 69.000 víctimas producto del enfrentamiento entre las fuerzas de seguridad (policía y militares) y las guerrillas del MRTA y Sendero Luminoso.
Cárdenas es la más prominente figura de esas agrupaciones armadas que deja la prisión por cumplir su condena. Un antiguo jefe policial, el general John Caro, explicó a Canal N que Cárdenas fue uno de los terroristas más crueles que tuvo el Perú en la década del 80 y parte del 90. "Él es el que inventa las cárceles del pueblo, donde se encerraba por meses a las personas" añadió.
En los próximos meses, otros exjerarcas de las guerrillas saldrán también libres por cumplir sus largas condenas, que fluctúan entre los 20 a 25 años, anunció el ministro del Interior.
El MRTA ha desaparecido prácticamente de la escena peruana, tanto a nivel militar como político. En 2004, Cárdenas tomó distancias del MRTA desde su centro de reclusión en una declaración formal.
Caro deploró que Cárdenas no haya sido condenado a perpetuidad y haya recuperado su libertad a pesar de haber sido un militante de línea dura en el MRTA.
"El terrorismo cruel y sanguinario vuelve a las calles para caminar junto con nosotros. Él debió quedarse para siempre en la cárcel", agregó.