VENTIMIGLIA.- Un campamento de migrantes ubicado en la frontera franco-italiana fue desmantelado hoy por la policía italiana, pero los ocupantes -unos 50 refugiados y militantes- buscaron albergue en un sector de rocas en la costa.
El desmantelamiento del campamento fue decidido por la justicia de Imperia (Italia), que acusó a los ocupantes de robo de agua y electricidad.
Unos 30 migrantes y unos 20 militantes italianos, advertidos de la decisión, abandonaron el campamento para refugiarse en las rocas.
Un cordón de unos treinta policías se hallaba cerca de las rocas, frente a los migrantes que amenazaban con tirarse al mar. La policía en tanto, aseguró que no tenía intención de intervenir en las rocas.
Los migrantes y militantes desplegaron una bandera con una frase en inglés en la que se podía leer: "Queremos la libertad de atravesar la frontera".
Este campamento, situado a un centenar de metros de la frontera francesa y cerca de la ciudad gala de Menton, reagrupaba, según el día, a hasta 250 personas, indicó Giuseppe Maggese, adjunto del jefe de la policía de Imperia, que estimó que muchos se fueron el martes por la noche al enterarse de la inminente evacuación.
