MOSCÚ - Los bombardeos rusos destruyeron un puesto de mando del grupo Estado Islámico (EI) cerca de Raqa, feudo de la organización yihadista en el nordeste de Siria, así como un búnker subterráneo,
"En las últimas 24 horas, los aviones SU-34 y SU-24M efectuaron más de 20 salidas aéreas contra nueve instalaciones del Estado Islámico", precisó el ministerio de Defensa ruso.
Un puesto de mando en Raqa y un búnker subterráneo en el que se almacenaban explosivos quedaron destruidos, añadió.