Rusia está bombardeando desde el pasado 30 de septiembre varias provincias del norte y el centro de Siria, argumentando que buscan atacar al EI.
AP (archivo)
BEIRUT.- Más de 40 grupos rebeldes sirios hicieron un llamado a los países de Oriente Medio a que formen una alianza para contrarrestar los ataques de Rusia.
"La nueva realidad requiere que las naciones de la región, en general, y los aliados, en particular, aceleren la formación de una coalición para hacer frente a la alianza ruso-iraní, que está ocupando Siria", señalan en una nota difundida por internet.
Los insurgentes no precisaron a qué estados se dirigen o cuáles son sus aliados.
El texto está firmado por algunas de la organizaciones armadas más importantes de Siria, como el Movimiento Islámico de los Libres de Sham, el Frente del Levante, el Ejército del Islam y la Legión del Islam, así como por varias brigadas que pertenecen al moderado Ejército Libre Sirio (ELS).
El documento no está suscrito por el Frente al Nusra -filial siria de Al Qaeda-, que suele colaborar con algunas de esas facciones en la lucha contra el régimen sirio.
Varios de esos grupos reciben apoyo de países como Turquía, Qatar y Arabia Saudita.
El comunicado destaca que "la ocupación rusa" en Siria se produce en un momento que coincide con la salida de la etapa de creación de la "revolución" a una fase donde están incluidos "intereses regionales".
Las facciones alertaron de que esta mutación sólo puede traer "más violencia y terrorismo".
Rusia está bombardeando desde el pasado 30 de septiembre varias provincias del norte y el centro de Siria, argumentando que buscan atacar al grupo terrorista Estado Islámico (EI).
Sin embargo, activistas y opositores han denunciado que también ha lanzado bombardeos contra objetivos civiles y bases de organizaciones rebeldes sirias.
En su nota, los grupos insurgentes lamentaron "la masacre perpetrada en el norte de Homs por parte de aviones rusos con casi 50 civiles muertos, lo que constituye el primer crimen de guerra de Rusia".
Además, los rebeldes acusaron al régimen de Bachar al Asad de haberse convertido en un "Gobierno fascista" por haber reclamado públicamente "fuerzas ocupantes" en el país, en referencia a Irán y Rusia, para participar en el derramamiento de sangre de sirios.
Asimismo, advirtieron de que "esta ocupación corta el camino de cualquier solución política" al conflicto.
Siria es escenario desde hace más de cuatro años de una contienda que se ha cobrado la vida de más de 240.000 personas, según cifras del Observatorio Sirio de Derechos Humanos.