BRUSELAS.- Alemania pedirá hoy evitar una retirada precipitada de las fuerzas de la OTAN que continúan en Afganistán, tras los últimos acontecimientos en Kunduz (norte del país), dijo hoy a su llegada a una reunión de ministros de Defensa de la Alianza la titular alemana, Ursula von der Leyen.
Según la ministra alemana, los acontecimientos en Kunduz ponen de manifiesto que la OTAN debe ser flexible a la hora de plantear el repliegue de sus tropas en el país.
"Por ello pediré hoy que no organicemos una retirada de Afganistán según un calendario rígido, sino que analicemos la situación allí y coordinemos la retirada en función de ello, paso a paso", dijo.
Insistió en que le interesa que la Alianza se centre en un "análisis basado en condiciones", para determinar cómo proceder en Afganistán.
En ese contexto, consideró que más que plazos, es importante que la OTAN se centre en las condiciones concretas en Kunduz, en Afganistán y en si la población afgana necesita "más tiempo y apoyo".
"Necesitaremos ver cómo seguimos adelante y si deberíamos quedarnos más tiempo", añadió.
Los ministros de Defensa de la OTAN hablarán hoy de la situación en Kunduz, después de que los talibanes se hicieran con su control temporalmente la semana pasada y se produjera el ataque por EE.UU. a un hospital de Médicos Sin Fronteras.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, dijo hoy a su llegada a la reunión que los ministros "debatirán la situación de seguridad" y el futuro de la misión de apoyo en el país.
Subrayó, en ese contexto, que la OTAN mantendrá su respaldo a las fuerzas afganas, y que en función de la opinión militar sobre la seguridad en el país y la capacidad de su Ejército, se tomará una decisión en relación a la futura presencia allí de la Alianza.
El pasado martes el jefe de las fuerzas de EE.UU. en Afganistán, el general John Campbell, indicó que dadas las condiciones sobre el terreno, cree necesario ofrecer al Presidente de EE.UU., Barack Obama, opciones diferentes al plan actual, que contempla una reducción de los 9.800 soldados estadounidenses presentes en ese país a partir de mayo de 2016, con el mantenimiento de una fuerza residual en 2017.
El embajador estadounidense ante la Alianza, Douglas Lute, dijo ayer en una rueda de prensa telefónica que Estados Unidos aún no ha decidido el nivel de fuerzas que mantendrá en Afganistán en 2016 y en años posteriores y que esa decisión no se concretará en la reunión ministerial de hoy.