LA HABANA.- El vicecanciller checo, Martin Tlapa, inició este lunes una visita oficial a Cuba para estrechar las relaciones económicas, dejando atrás dos décadas de desavenencias políticas y desencuentros internacionales.
Tlapa y su homóloga cubana, Ana Teresita González, "coincidieron en las potencialidades que existen para el avance de los nexos en diferentes esferas, en particular en la económica-comercial", según informaron en un breve comunicado entregado por la cancillería de la isla.
Durante los casi 20 años de relaciones diplomáticas, establecidas en 1993, La Habana y Praga han tenido marcadas diferencias en materia de derechos humanos y oposición política.
República Checa copatrocinó resoluciones condenatorias de Cuba en la desaparecida Comisión de DD.HH. de la ONU, y apoyó la política de Estados Unidos contra Cuba en esa materia.
Varios diplomáticos, parlamentarios o miembros de ONG checas fueron detenidos o expulsados de la isla por apoyar a miembros de la ilegal disidencia cubana.
Sin embargo, según el comunicado oficial, Tlapa y González coincidieron en "la disposición para continuar trabajando sobre la base del respeto mutuo y la no injerencia en los asuntos internos".
Poco antes de emprender su viaje de dos días, el vicecanciller dijo a una radio de su país que Cuba dialoga con Estados Unidos y la Unión Europea, "por eso creo que llegó el momento de retomar los contactos que tuvimos anteriormente".
Además, señaló que "no abandonaremos la línea de nuestra política exterior". Sin embargo, creen "que ha llegado el momento de dar oportunidad a otros sectores, como por ejemplo al empresarial".
El comercio bilateral entre Cuba y la República Checa fue de 45,2 millones de dólares en 2014, según cifras oficiales cubanas.
