BRUSELAS.- Los líderes comunitarios intentarán este jueves consensuar una respuesta a largo plazo frente a la crisis de refugiados y harán especial hincapié en la necesidad de estrechar la cooperación con países como Turquía, reforzar las fronteras exteriores y mejorar la política de repatriación.
En su cuarta cumbre dedicada a la llegada de demandantes de asilo, está previsto que los jefes de Estado y de gobierno de la UE pidan a los gobiernos nacionales que aún no lo han hecho que concreten sus contribuciones financieras para las organizaciones de apoyo a los refugiados y a los fondos europeos de ayuda a Siria y África.
Esta llamada de atención se producirá después de que la Comisión Europea (CE) dijese este miércoles estar "preocupada" porque las contribuciones anunciadas ahora por los países hasta ahora están "muy por debajo de las expectativas".
España ha sido junto a Alemania y Luxemburgo de los pocos países que ya han adelantado a cuánto ascenderá su aportación al fondo fiduciario para África, 3 millones de euros (3,4 millones de dólares) cada uno.
Los Veintiocho insistirán, por otro lado, en la necesidad de reforzar la cooperación con países terceros como Turquía, con quien la UE negocia un plan de acción conjunto de respuesta a la crisis, según portavoces comunitarios.
Subrayarán que la aplicación de este plan irá acompañada de un "compromiso político y financiero sustancial" por parte de la UE y abrirá la puerta a la facilitación de visados en el futuro, una reclamación de Ankara a cambio de contener los flujos de refugiados hacia territorio comunitario.
También tratarán la cooperación con países de tránsito del Mediterráneo oriental y los Balcanes occidentales y de origen de África.
Pondrán especial atención en la mejora de las repatriaciones de refugiados irregulares sin derecho a asilo, y apoyarán introducir el principio "más por más" que vincula los procesos de deportación con la ayuda al desarrollo, agregaron las fuentes.
El refuerzo de las fronteras externas de la UE también volverá a estar sobre la mesa de negociaciones con ideas como el fortalecimiento de la Agencia Europea de Control de Fronteras Exteriores (Frontex), con vistas a crear a largo plazo un cuerpo de policía fronteriza y costera que apoye a los países más presionados por los flujos migratorios.
Durante la cena de trabajo, los mandatarios europeos se centrarán en la dimensión externa de la crisis de refugiados y decidirán si incluyen en su declaración una frase, que podrían no respaldar todas las delegaciones, en la que expresan su "preocupación por los ataques rusos sobre la oposición siria y los civiles y por el riesgo de una mayor escalada militar" en el país, según los portavoces.
Parte de la reunión estará dedicada también a las negociaciones técnicas entre la UE y el Reino Unido ante el referéndum de pertenencia al club comunitario que celebrará este país, aunque no se esperan avances sustanciales hasta la cumbre de diciembre.