JERUSALÉN.- El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, exigió hoy a israelíes y palestinos poner fin a la espiral de violencia en la zona, horas antes de llegar a Israel y Palestina para reunirse con sus máximos líderes.
"Suficiente, es suficiente. Dejemos de hipotecar el futuro de ambos pueblos y de la región", dijo el secretario general en un mensaje de vídeo que fue grabado en Bratislava, donde participó en un acto conmemorativo del 70 aniversario de la ONU.
Ban, que hoy mismo se reunirá posiblemente con el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y mañana lo hará con el presidente Mahmud Abás, en Ramala, se dirige en primer lugar a los palestinos para manifestarles su "consternación" por el hecho de "ver a jóvenes, niños, levantando un arma para matar".
"Entiendo su frustración. Sé que vuestras esperanzas de paz han sido interrumpidas en incontables ocasiones. Están cansados por la continuación de la ocupación y la expansión de asentamientos. Muchos de ustedes están decepcionados con vuestros líderes y con nosotros, la comunidad internacional, por no haber podido poner fin a la ocupación", agrega.
"Pero déjenme ser claro, la violencia sólo minará las legítimas aspiraciones palestinas para alcanzar un estado", subrayó al pedir a la juventud que exija a sus líderes "una solución política" y se conviertan "en una voz pacífica por el cambio".
La visita del secretario general de la ONU coincide con una ofensiva diplomática en la comunidad internacional para frenar la espiral de violencia que comenzó el 1 de octubre.
En ella han muerto hasta ahora 43 palestinos, cerca de la mitad de ellos autores o supuestos autores de ataques consumados o frustrados y, el resto, en enfrentamientos con el Ejército israelí; ocho israelíes, un árabe israelí y un emigrante eritreo.
En su mensaje, Ban expuso a los israelíes su comprensión por la situación, por "el miedo de los niños de ir a la escuela", de que "cualquiera en las calles sea un víctima potencial".
En esa circunstancia, sostiene, "seguridad es obviamente una prioridad inmediata", pero les advierte que las medidas adoptadas recientemente por el Gobierno israelí no son receta para alcanzar la seguridad.
"Muros, retenes (policiales), duras respuestas por parte de las fuerzas de seguridad y la demolición de casas, no pueden sustentar la paz y la seguridad", les explica.
Y alienta a ambas a partes a buscar una "solución de seguridad" en la forma de un "horizonte político que rompa este ciclo de violencia y miedo".
También les insta a "no permitir que los extremistas utilicen la religión como combustible para avivar aún más las llamas del conflicto" y a sus líderes a reiniciar negociaciones de paz para poner fin a la ocupación y concretar la solución de dos estados, así como a garantizar el statu quo en los lugares sagrados.
Originada en la disputa entre ambos pueblos en Jerusalén este por la Explanada de las Mezquitas, que los judíos conocen como Monte del Templo, la violencia casi desenfrenada amenaza con el estallido de una nueva Intifada.
La inesperada visita de Ban coincide con los esfuerzos del secretario de Estado de EEUU, John Kerry, que se reunirá en Alemania con Netanyahu y, el viernes, con Abás en Amán.