DAMASCO/BEIRUT.- Al menos 120 mil personas se vieron obligadas a huir de sus casas en el centro y norte de Siria desde que comenzaron los ataques aéreos rusos en el país, según estimaciones de la ONU.
Naciones Unidas calcula esa cifra de desplazados en las disputadas provincias de Alepo, Hama e Idlib desde comienzos de octubre.
Precisamente en esas regiones, se producen los ataques que la aviación rusa lanza desde finales de septiembre contra diversos grupos rebeldes.
A ello se añaden los enfrentamientos continuados entre rebeldes radicales y moderados, así como entre insurgentes y tropas del régimen.
"La mayoría se quedaron en las provincias afectadas, cerca de sus pueblos y ciudades, mientras otros huyeron cerca de la frontera con Turquía", dijo el portavoz de la ONU, Stephane Dujarric, en Nueva York.
La situación de cientos de miles de refugiados en el norte de Siria está además empeorando desde el inicio de los ataques rusos, señaló un portavoz del Consejo Noruego para los Refugiados en la capital jordana Ammán.
"La situación es desesperada en los campamentos sobrecargados", señaló. Activistas señalaron que la lluvia y el tiempo es cada ver peor en el norte de Siria y las tiendas de los refugiados quedan destrozadas. Además de refugio, les faltan alimento y medicinas.
