NACIONES UNIDAS.- El emisario de la ONU para la paz en Siria urgió a las potencias mundiales el martes a aprovechar el "impulso" de las actuales negociaciones y acordar un proceso político que ponga fin a cuatro años de guerra.
"El impulso de Viena no debe ser malogrado", dijo Staffan de Mistura a los periodistas luego de informar al Consejo de Seguridad.
Representantes de unos 20 países y agencias internacionales se reunirán en Viena el sábado para impulsar un plan de paz para Siria que incluiría un cese del fuego entre el régimen de Bashar al Asad y algunos grupos de oposición.
Estos encuentros deben "establecer objetivos realizables para el pueblo sirio. Uno de ellos debería ser la disminución de la violencia", afirmó el emisario.
Esta es la segunda reunión sobre Siria en la capital austríaca desde fines de octubre.
La reunión de Viena debe definir la lista de grupos terroristas, había indicado el lunes el ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Mohammad Javad Zarif, confirmando la participación de representantes de Teherán junto con Moscú, principal apoyo al régimen de Damasco.
Rusia e Irán, que apoyan al presidente Bashar al Asad, no están de acuerdo con Estados Unidos y sus aliados europeos y árabes, sobre los grupos que deben ser calificados de terroristas y aquéllos que pueden considerarse como parte de la oposición siria.
La reunión de Viena abordará también la cuestión de quiénes podrán participar del proceso político.
La ONU califica al grupo Estado Islámico, al Frente Al Nusra (asociado a Al Qaida) y a otros grupos de "terroristas", y De Mistura sostiene que es tiempo de que los países involucrados encuentren un punto de acuerdo sobre el tema.
"Mi trabajo es asegurar que los grandes países como Rusia, Arabia Saudita e Irán se reúnan alrededor de una mesa y presenten un plan político", declaró el emisario.
Durante la reunión a puertas cerradas del Consejo de Seguridad, De Mistura hizo referencia a la perspectiva de "un resultado concreto" el sábado en Viena, informaron diplomáticos.
La embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Samantha Power, dijo en su cuenta de Twitter que las negociaciones de Viena deberían "conducir a un cese del fuego y abrir el camino a una solución política".
La guerra en Siria, que comenzó en marzo de 2011 con manifestaciones pacíficas que degeneraron en una guerra civil, ha dejado a la fecha más de 250.000 muertos, 6,5 millones de desplazados internos y 4,2 millones de refugiados en el extranjero.