Kerry, señaló que con la aceleración de los bombardeos, el EI "cada vez va a tener más dificultades" y que ya ha perdido "el 25 % de su territorio".
EFE
PARÍS.- El secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, avanzó hoy que la intervención aérea contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI), que se ha acelerado en los últimos días, va a mantenerse a ese mismo ritmo elevado.
El jefe de la diplomacia estadounidense indicó en el telediario de máxima audiencia de la cadena francesa "France 2" que aunque "evidentemente dependerá de los objetivos, en términos generales" va a seguir así porque esas incursiones han dado buenos resultados.
Kerry, que hoy se reunió con el Presidente de Francia, François Hollande, en el Palacio del Elíseo, señaló que con la aceleración de los bombardeos el EI "cada vez va a tener más dificultades", como lo demuestra el que ya haya perdido "el 25 % de su territorio".
"Avanzamos para meterles presión", dijo Kerry en esa entrevista, al tiempo que precisó que uno de los objetivos son sus vías de suministro y el cese del contrabando de petróleo de la organización terrorista con países como Irak o Turquía, "una fuente importante de financiación".
Kerry descartó el envío de tropas y subrayó que "no es la mejor estrategia. Necesitamos gente sobre el terreno, pero no la nuestra. Le corresponde a quienes viven allí echar al EI y tomar el poder", precisó.
El secretario de Estado sostuvo que esa es la razón de que sea "tan importante" una solución política, y se mostró confiado en que esta pueda vislumbrarse a corto plazo.
"Por primera vez tenemos a Irán y a Rusia en la mesa de negociaciones. Si en las próximas semanas podemos hacer que la oposición y el entorno de Al Assad se encuentren, creemos que podemos alcanzar un alto el fuego, que está a nuestra alcance", apuntó.
Conseguido eso, añadió, "si podemos poner en marcha de forma efectiva una transición política podremos movilizar a las fuerzas gubernamentales con la oposición para combatir juntos el EI. Esa es la solución más eficaz".
Kerry recalcó que su país mantiene que la salida del Presidente sirio "sigue siendo esencial" porque, en su opinión, "ha perdido toda la credibilidad ante su pueblo" y no puede volver a ser legítimo para gobernar el país.