Tras votar, la Presidenta saliente habló durante 28 minutos con la prensa y llamó a hacer "un ejercicio de reflexión". Fue denunciada ante la justicia por supuesta violación a la veda electoral.
AFP
SANTIAGO.- "Haré lo que hice siempre, militar", dijo Cristina Fernández cuando fue a votar para la primera vuelta en octubre. Es el indicio más claro que ha dado sobre su futuro político la Mandataria, que abandonará el poder el próximo 10 de diciembre, cuando por primera vez en 26 años deje de ocupar un cargo público.
Sus allegados prevén que en lo inmediato se tomará un descanso, se dedicará a sus nietos y a sus dos hijos, con los cuales siente que tiene una deuda familiar pendiente. Pero un animal político como ella es difícil que se retire a sus cuarteles.
"Cristina buscará la posibilidad de ser líder de la oposición, pero no le será fácil salir indemne del golpe de esta derrota. Porque el peronismo tiene cuentas pendientes con ella, a quien le adjudica sobre todo la responsabilidad de haber perdido la provincia de Buenos Aires", comenta a este diario José di Mauro, director de la revista Semanario Parlamentario y autor del libro "Cristina K. La dama rebelde". (Editorial Sudamericana, 2004).
Convertida en líder de la oposición tendría una trinchera desde la cual, además de defender su legado y mantener vivo el kirchnerismo, podría intentar volver a la Casa Rosada en 2019.
Las condiciones actuales favorecen la aspiración de Cristina. Por ahora, no hay otro militante del kirchnerismo para liderar la oposición a Mauricio Macri, incluido el derrotado Daniel Scioli, responsable de interrumpir el proceso de crecimiento electoral que el Frente para la Victoria mantenía desde 2003.
Ella, en cambio, a pesar de los vaivenes y las crisis que ha debido enfrentar durante dos períodos presidenciales (desde 2007), se va con una popularidad cercana al 50%, según varias encuestadoras, lo que la convierte en el Presidente que dejará el puesto con el mayor puntaje de aprobación desde que se instauró la democracia en el país.
Denuncias judiciales
Cristina, tanto como su hijo Máximo, enfrenta acusaciones de lavado de dinero por Hotesur S.A., el hotel que los Kirchner poseen en la Patagonia. Y existen también otras denuncias de corrupción -hasta el momento sin pruebas-, que podrían entorpecer sus aspiraciones de liderazgo.
Esta situación hace creer a Sylvina Walger, periodista y biógrafa de Cristina Fernández, que la Presidenta desaparecerá de la escena pública. "Lo más seguro es que se haga humo, a no ser que Macri tenga las 'pelotas' de mandarla presa. Eso es lo que mucha gente está esperando", afirma a
"El Mercurio".
Quizás previendo eso, Cristina se aseguró una importante representación legislativa que, además de influencia política, le otorgará cierto apoyo parlamentario ante posibles investigaciones judiciales.
"En Argentina existe la costumbre de que el Poder Judicial se vaya adecuando a los tiempos políticos. Una suma de fallos adversos se han registrado los últimos días contra el gobierno. Pero los problemas no serían solo para ella, sino sobre todo para buena parte de la dirigencia que hoy está en el gobierno y que está en la mira de muchos jueces", indica Di Mauro.