SANTIAGO.- Este jueves el líder de la coalición Cambiemos, Mauricio Macri, será investido como el nuevo Presidente de Argentina y dará inicio a una nueva era tras 12 años de kirchnerismo.
Su asunción al poder, que implica la salida de Cristina Fernández, ha estado marcada por un clima de tensión y por los obstáculos que el Gobierno de la esposa de Néstor Kirchner ha dejado a su sucesor.
"Cristina K" tomó una serie de medidas económicas y políticas que perjudicarán la futura gestión del ingeniero de centro derecha, tras su comienzo este jueves.
Una de ellas ocurrió a sólo seis días hábiles de dejar la Casa Rosada, cuando nombró a cuatro nuevos embajadores. Con ellos, fueron 16 las designaciones realizadas por la Mandataria desde octubre pasado.
Más gasto y menos recursos
Otra de las marcas que dejará la líder peronista a Macri, es una economía al borde de la recesión y un déficit fiscal del 7%.
Semanas antes de entregar el poder, Kirchner firmó dos decretos que
ampliaron el presupuesto estatal a través de la emisión de dos nuevos pagarés por US$ 1.145 millones. Los documentos que establecieron una nueva deuda para el Ejecutivo, se hicieron efectivos este miércoles y vencerán el próximo 8 de marzo, a solo cien días de comenzado el nuevo Gobierno.
Pero el escenario es aún más complicado. La Presidenta restringió el traspaso de fondos desde las provincias al gobierno federal, lo que disminuirá la billetera fiscal con la que contará Macri desde este 10 de diciembre.
"Muy pronto muchos argentinos se van a enterar que ellos también tenían subsidios que les pagaba el Estado", sentenció la Mandataria, asumiendo que la gestión de Macri deberá hacer un ajuste fiscal para superar la falta de recursos.
Además, Fernández aumentó la cantidad de trabajos en el sistema público y solicitó que se le adjudique una división especial de cien integrantes de la policía federal para su custodia. Una medida inédita entre los ex mandatarios, pues los efectivos designados para la seguridad de los ex presidentes anteriores sólo alcanzaban los 30 efectivos.
La ceremonia
Una de las últimas polémicas que protagonizó la saliente gobernadora tiene relación con la la ceremonia de cambio de mando. Tradicionalmente el traspaso de poderes se hacía en la Casa Rosada, pero los gobiernos kirchneristas que estuvieron 12 años en el poder, establecieron la tradición de realizarlo en el Congreso.
Macri solicitó jurar en el Parlamento y llevar a cabo el cambio de mando en la Casa Rosada. Así evitaría abucheos y alborotos en su contra por parte de la bancada peronista. Pero la misiva fue rechazada por Fernández.
Tras el hecho, el Presidente electo decidió imponer un recurso ante la justicia que le permitiera comenzar su mandato a las 00:00 horas de este jueves y así determinar dónde realizar la ceremonia. Sin embargo, la respuesta de Fernández fue mayor: anunció que no asistirá y no entregará ni el bastón, ni la banda presidencial a su opositor.
Finalmente, entre sus últimos coletazos contra el ingeniero de 56 años, "Cristina K" decidió mantener como propio el
Twitter de la Casa Rosada. La cuenta CasaRosadaAR, que tiene 320.000 seguidores, cambió su descripción a "Twitter de las Presidencias Néstor Kirchner y Cristina Kirchner 25 de mayo 2003 al 10 de diciembre 2015" y se declaró no oficial a partir de este jueves.
Pese a los obstáculos, Macri jurará alrededor de las 12:00 horas en el Congreso y posteriormente se trasladará a la Casa Rosada para tomar posesión. Así, tras ocho años en el poder, Cristina Fernández de Kirchner saldrá de la Presidencia, aunque según dijo, no se quedará lejos. "Quédense tranquilos, no me voy a ir", aseguró.