SANTIAGO.- El Gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) firmaron este martes un inédito acuerdo en favor de las víctimas tras años de enfrentamientos, el que incluye componentes de verdad, justicia, reparación y garantías de no repetición.
Entre los anuncios se estableció la creación de un Tribunal para la Paz y una comisión para el esclarecimiento de la verdad y la no repetición. Además, se llevará a cabo el establecimiento de responsabilidades y de rendición de cuentas.
"Todos los participantes del conflicto deberán asumir su responsabilidad", expresó Dag Nylander, representante de Noruega, país que participó del proceso como garante junto a Cuba. En tanto, Chile y Venezuela actuaron como estados acompañantes de las negociaciones.
Al acto, que tuvo lugar en el complejo de El Laguito de La Habana, asistieron diez víctimas del conflicto colombiano.
Nylander agregó que se buscará la "satisfacción de los derechos de víctimas, mediante combinación de mecanismos judiciales y extrajudiciales". En el pacto también se estableció la creación de una unidad especial para la búsqueda de personas desaparecidas en el contexto del conflicto, a la cual la FARC se comprometió a colaborar.
Asimismo, se añade que cuando finalicen las hostilidades en Colombia, se podrá otorgar de acuerdo con el Derecho Internacional Humanitario la amnistía más amplia posible, pero no podrán beneficiarse de esta medida ni habrá indultos para los delitos de lesa humanidad, genocidio, graves crímenes de guerra o violaciones a los derechos humanos.
El acuerdo firmado este martes es el quinto punto de la agenda para el término del conflicto armado entre el Ejecutivo y las FARC. Es considerado uno de los más relevantes pues da paso al último de los puntos de las negociaciones que implica el fin definitivo de los enfrentamientos a través de la dejación de armas y el cese del fuego bilateral.
"No es retórica decir que el anuncio del acuerdo en el tema de victimas pronostica el posible fin del conflicto", Humberto De la Calle, jefe del equipo negociador del Gobierno colombiano en La Habana.
En tanto, Iván Márquez, uno de los negociadores de las Farc en La Habana afirmó que "la paz exige reconciliación, y la reconciliación exige normalización de la vida política y social de Colombia".