LA HABANA- El Gobierno de Cuba insistió hoy en que la vigencia del embargo a la isla impide la total normalización con EE.UU, aunque admite "avances importantes" gracias a una nueva relación basada en "respeto, igualdad y reciprocidad", como balance del aniversario del restablecimiento de sus lazos diplomáticos.
La directora para EE.UU de la Cancillería cubana, Josefina Vidal, señaló hoy a la prensa que, un año después del anuncio del deshielo diplomático del 17 de diciembre, "no se ha avanzado en la solución de los temas que para Cuba son esenciales para que haya relaciones normales", entre los que destacó el "bloqueo".
No obstante admitió "importantes cambios" como la apertura de las embajadas o los dos encuentros entre los presidentes de ambos países, además de varios acuerdos que ya han cristalizado en las áreas de protección de medioambiente y para el establecimiento del correo postal directo, anunciado hace una semana.
Vidal adelantó que "en breve" se va a anunciar otro acuerdo sobre aviación civil para el establecimiento de vuelos regulares entre los dos países, tema que delegaciones de ambos Gobiernos discuten desde el pasado lunes en Washington y que están a punto de cerrar.
Sobre la vigencia del embargo, Vidal indicó que las medidas adoptadas por el presidente Barack Obama para aliviar su impacto, "aunque son positivas", tienen un alcance limitado y recordó que el mandatario todavía dispone de prerrogativas presidenciales para "ampliar esas medidas e incluso adoptar nuevas".
"Por ejemplo, podría permitir a Cuba al uso del dólar en sus transacciones económicas internacionales o autorizar el acceso a créditos", mencionó Vidal, que lidera por la parte cubana las negociaciones con EE.UU para establecer esta nueva relación.
Para Cuba, los otros aspectos "esenciales" para alcanzar una relación normal con EE.UU son la devolución de los territorios que ocupa la base naval de Guantánamo, el fin de los programas dirigidos a promover cambios internos en la isla y el fin de las políticas migratorias que dan un trato preferencial a los cubanos.
"Para alcanzar la normalización insistimos en que será imperativo que el Gobierno de EE.UU elimine todas estas políticas del pasado", reiteró.
Vidal reafirmó la disposición de Cuba a seguir trabajando para construir "un modelo de coexistencia civilizada", que será "la mejor contribución que nosotros podremos dejar a las presentes y futuras generaciones de cubanos y estadounidenses".