EFE
NUEVA YORK.- El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó hoy viernes por unanimidad una resolución que respalda un plan de paz para Siria que contempla el inicio de conversaciones sobre un alto el fuego y un gobierno de transición en enero.
La resolución, presentada tras el encuentro de los ministros de Exteriores de 17 países en Nueva York, valida la "hoja de ruta" acordada el mes pasado en Viena, que preveía el establecimiento de un gobierno de transición en Siria en seis meses y nuevas elecciones en 18 meses.
Según el texto, la ONU deberá organizar e implementar un alto el fuego en Siria. Además solicita al secretario general de la ONU, Ban Ki-mooon, que presente opciones en un plazo de un mes para un mecanismo que permita monitorear el cese del fuego.
El Consejo "demanda que todas las partes cesen inmediatamente los ataques contra civiles y objetivos civiles", dice la resolución, que repite una formulación utilizada en declaraciones anteriores.
Tan pronto como se "emprendan los primeros pasos hacia una transición política", debe entrar en vigor un alto el fuego en todo el país, bajo los auspicios de la ONU y del que quedarán excluidos los grupos terroristas, según la resolución 2254.
"La resolución que acabamos de aprobar es un hito", dijo el secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, que presidió la reunión y que recordó que por primera vez tras cuatro años y medio de guerra la comunidad internacional "ha sido capaz de unirse sobre una salida" al conflicto.
Según Kerry, la aprobación del texto "envía un clara señal de que ha llegado el momento de parar la matanza en Siria y sentar las bases de un Gobierno que la población que ha sufrido durante tanto tiempo pueda apoyar".
El otro gran artífice de la iniciativa, su homólogo ruso, Serguéi Lavrov, consideró que el acuerdo de hoy y los alcanzados previamente en Viena son "una plataforma única para resolver el derramamiento de sangre sirio".
A grandes rasgos, la resolución recoge los acuerdos ya cerrados en Viena el mes pasado, pero les da la legitimidad del Consejo de Seguridad y simboliza el creciente entendimiento de la comunidad internacional.
El texto, sin embargo, no menciona algunos de los puntos que siguen pendientes de resolverse, entre ellos qué grupos de la oposición participarán en las negociaciones y cuáles serán definidos como terroristas y quedarán excluidos.
Tampoco hace referencia al futuro del presidente sirio, Bashar al Assad, un asunto sobre el que sigue habiendo distintas posturas, según admitió Kerry.
Para EE.UU., Al Assad "ha perdido su credibilidad" y no tiene la capacidad de "unir al país", dijo Kerry, mientras que por ahora Rusia sigue defendiendo la posibilidad de que continúe en el poder.