BEIJING.- El prominente abogado de derechos humanos chino Pu Zhiqiang fue condenado hoy a una pena suspendida de tres años de cárcel por "incitación al odio étnico" y "provocación de disturbios" por siete comentarios irónicos que publicó en una red social, según la cadena de televisión oficial CCTV.
Pu recibió la sentencia poco después de las 10.00 hora local en el Juzgado Intermedio Número 2 de Beijing, en cuyas inmediaciones había una fuerte presencia policial que se llevó por la fuerza a varios activistas que acudieron para mostrar su apoyo al abogado y que bloqueó a los medios de comunicación presentes.
De 50 años, Pu, que fue abogado de Ai Weiwei y una de las figuras más visibles de la lucha por las libertades en China, recibió hoy su sentencia tras ser detenido en mayo de 2014, tras participar en un encuentro para conmemorar el 25 aniversario de la matanza de Tiananmen, y juzgado el lunes de la semana pasada en Beijing.
El abogado puede ser puesto en libertad pronto, ya que pasó 19 meses detenido antes del juicio, por lo que podría cumplir el resto de la sentencia fuera de prisión, según publica el diario hongkonés South China Morning Post (SCMP).
La pena es significativamente menor que la máxima de 17 años de prisión que podrían haber sumado los dos delitos, y responde a la petición de la Fiscalía de una sentencia "ligera" el pasado lunes.
No obstante, el investigador de China de Amnistía Internacional, William Nee, dijo en un comunicado que, aunque "es claramente positivo que Pu Zhiqiang seguramente no pase otra noche en la cárcel, eso no puede ocultar que se trata de una burda injusticia contra él".
Pu admitió ante los jueces el pasado lunes que había mandado los siete mensajes, pero "ofreció disculpas en caso de que éstos hubieran dañado a alguien" y expresó su esperanza en que se emita un veredicto "razonable".
En ellos criticó, entre otras cosas, el tratamiento del régimen a las minorías musulmanas en el país y habló de presunto nepotismo en favor del comandante Mao Xinyu, único nieto del fundador del régimen, Mao Zedong, casi siempre usando un tono irónico.
