Felipe González durante el acto de cierre de campaña de las elecciones generales que los socialistas celebraron el pasado 18 de diciembre en Sevilla
EFE
MADRID.- El ex presidente del Gobierno español Felipe González criticó las maniobras del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, para neutralizar a la oposición que ganó las pasadas elecciones legislativas y que se han traducido en profundizar "en la vía de su fracasada revolución", agravando así la crisis económica.
En un artículo publicado este sábado en el diario El País, bajo el título "La destrucción de Venezuela", González lamenta cómo el Gobierno de Maduro "ha llevado a Venezuela a una situación insoportable, tanto desde el punto de vista social y económico, como en materia de seguridad ciudadana, de libertades democráticas o de corrupción generalizada".
Para el ex presidente socialista esto explica "el hartazgo de los ciudadanos que votaron el 6 de diciembre
dándole a la oposición dos tercios de la Asamblea", mientras Maduro "mantiene el poder ejecutivo y maniobra toscamente para impedir que haya un poder legislativo que represente la voluntad soberana de los venezolanos".
"Nada parece frenar el afán destructivo de la pareja Maduro-Cabello", alerta el ex presidente González, al apuntar que estos "en lugar de reconocer la voluntad soberana del pueblo, ponen por delante del bien común sus oscuros intereses".
Así, mientras se dedican a maniobrar y a tratar de neutralizar esa oposición "en vez de iniciar un diálogo con la mayoría indiscutible de la Asamblea", la situación económica se sigue agravando por culpa de las medidas del régimen y González pronostica un crecimiento del déficit público, que ronda ya el 20% del PIB, y que el Gobierno venezolano está financiando "dándole a la máquina de hacer bolívares".
"La oposición que ha ganado ampliamente las elecciones legislativas, sabe que el Ejecutivo es el que tiene que hacer ajustes y propone diálogo para enfrentar los desafíos. El Gobierno cree que la victoria de la oposición es un error de los votantes y trata de responder radicalizando la ya fallida revolución", resume la situación González.
"Venezuela está ante una crisis humanitaria grave, que exigirá ayuda internacional rápida", ya que "el aparato productivo es tierra quemada y hay que reconstruirlo. No queda tiempo para enfrentar esta emergencia", advierte.