TOKIO.- Representantes de los gobiernos de Japón, Estados Unidos y Corea del Sur se reunirán el sábado en Tokio para coordinar una respuesta al ensayo atómico norcoreano de la semana pasada, informó hoy martes el ministro japonés de Asuntos Exteriores Fumio Kishida.
El viceministro japonés de Asuntos Exteriores, Akitaka Saiki, el subsecretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, y el vicecanciller surcoreano, Lim Sung-nam, se reunirán el 16 de enero en esta capital para "demostrar la estrecha cooperación trilateral para tratar con Corea del Norte", indicó Kishida durante una rueda de prensa.
Tokio, Washington y Seúl buscan estrechar su colaboración en materia de Defensa y seguridad tras la tensión que generó en la península coreana la cuarta prueba nuclear del régimen de Pyongyang.
Antes del encuentro del sábado, este miércoles representantes para la desnuclearización de la península coreana de los tres países se reunirán en Seúl para abordar el ensayo atómico norcoreano.
En la capital surcoreana las tres potencias tratarán posibles medidas tanto a nivel bilateral como multilateral, incluida una futura resolución del Consejo de Seguridad de la ONU en respuesta a la prueba norcoreana.
Kishida celebró además la decisión de Estados Unidos de desplegar el domingo un bombardero estratégico de largo alcance estadounidense B-52 Stratofortress sobre la península coreana a raíz del test nuclear.
"(El despliegue) refleja el firme compromiso de Estados Unidos para cumplir su papel para la paz y la estabilidad en la región", dijo Kishida en declaraciones recogidas por Kyodo.
El ensayo nuclear subterráneo anunciado el pasado 6 de enero por Pyongyang ha incrementando la tensión en la península coreana, generado la protesta casi unánime de la comunidad internacional y llevado al Consejo de Seguridad de la ONU a meditar nuevas y más duras sanciones contra Corea del Norte.
El régimen liderado por Kim Jong-un aseguró haber detonado por primera vez una potente bomba de hidrógeno, aunque la mayoría de expertos sostiene que Pyongyang probablemente hizo estallar una bomba de fisión potenciada.
