MONTERREY.- El gobernador del Estado de Nuevo León, Jaime Rodríguez,
confirmó que 52 personas murieron y 12 resultaron heridas tras el motín de la cárcel de Topo Chico en México.
La que ya ha sido calificada como la peor tragedia carcelaria del país en su historia reciente, se habría originado por una pelea entre grupos rivales al interior del penal.
El gobernador informó a través de una conferencia de prensa ofrecida varias horas después del inicio del siniestro, que el enfrentamiento comenzó la noche del miércoles y durante la riña los reos prendieron fuego a una bodega de la presión donde se guardaban víveres.
Al mismo tiempo Rodríguez señaló que la situación "logró ser controlada por lo que ningún reo se fugó", descartando así las versiones que aseguraban lo contrario.
La situación generó la angustia de los familiares de los presos quienes llegaron en masa hasta las afueras del recinto penitencial a la espera de información concreta sobre las víctimas, ya que al principio no se manejaban cifras exactas de la cantidad de muertos, su identidad, ni el origen de la emergencia.
El hecho ocurre justo un día antes de la llegada a México del Papa Francisco, quien tiene agendado visitar una prisión de Ciudad de Juárez, al norte del país.
