MOSCÚ.- Rusia rechazó hoy la responsabilidad por el mortal ataque del lunes contra un hospital apoyado por Médicos Sin Fronteras (MSF) en la provincia de Idlib, en Siria, señaló hoy el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov.
Los activistas sirios acusaron a la aviación rusa del ataque en el que el centro asistencial quedó destruido.
Peskov consideró que las acusaciones son inaceptables y se remitió a la declaración del embajador sirio en Rusia, Riad Haddad, que acusó al Ejército estadounidense del ataque contra el hospital.
El ataque, que destruyó totalmente el hospital, dejó numerosos muertos. Según dijo el lunes el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, entre ocho y nueve personas, aunque la cifra podría aumentar. También hubo heridos.
MSF denunció que el hospital fue alcanzado cuatro veces en al menos dos ataques ocurridos en pocos minutos.
"La destrucción del hospital en la ciudad de Maarat al Nuaman deja a una población de unas 40 mil personas sin asistencia médica en una zona de conflicto activo", lamentó el lunes MSF, que apoyaba al centro médico desde septiembre.