Los demandantes, que residen en Australia, son la viuda y los hijos de 14 y 19 años de edad del malasio Chong Ling Tan, quien viajaba en clase preferente en el Boeing 777-200 que despegó de Kuala Lumpur hacia Beijing con 239 personas a bordo, entre pasajeros y tripulación.
Según la emisora ABC, la reclamación tramitada el 19 de este mes en el Tribunal Supremo del estado de Victoria, en el sureste de Australia, argumenta que la aerolínea había dicho que el viaje era seguro y que cumplía las precauciones de seguridad necesarias.
El pleito surge después de que el director de la Oficina Australiana de Seguridad en el Transporte, Martin Dolan, quien dirige las operaciones de búsqueda del aparato, rescatase de entre las hipótesis descartadas la de la complicidad del piloto.
El avión despegó pasada la medianoche y desapareció de los radares unos 40 minutos después, cuando había entrado en el espacio aéreo vietnamita.
Los investigadores que buscan el aparato desde entonces creen que el avión cambió de rumbo, por causas aún desconocidas, y acabó por estrellarse, agotado el combustible, en el mar, en un remoto lugar deshabitado en el sur del océano Índico.
Después de dos años de búsqueda sólo se ha encontrado un alerón del avión en la isla La Reunión, en la costa oriental de África, a miles de kilómetros de donde los expertos creen que se estrelló y prosigue la búsqueda, al oeste de la costa australiana.