LA PAZ.- El ministro de la Presidencia de Bolivia, Juan Ramón Quintana, negó hoy haber tenido un romance con Gabriela Zapata, la ex pareja del presidente Evo Morales, después de que ella lo acusara de traicionar al mandatario y revelara un supuesto intercambio personal de mensajes en un tono amoroso.
Quintana, considerado el hombre fuerte del Gobierno de Morales, dio hoy una rueda de prensa para rechazar las acusaciones lanzadas por Zapata en una carta difundida públicamente junto con la copia de las supuestas conversaciones románticas por WhatsApp.
"Respecto a una presunta relación sentimental, coloquial, romántica con la señora Zapata quiero desmentir categóricamente, desvirtuar de la manera más diáfana, más clara esta relación", sostuvo el ministro de la Presidencia.
El alto funcionario también insistió en que "no conoce personalmente" a Zapata, dijo que nunca nadie se la ha presentado, ni se la cruzado en la calle para tomar fotos o saludarse de mano.
También dijo que si hubiera tenido alguna relación con la expareja de Morales no habría presentado una denuncia contra ella como hizo por supuestos delitos económicos.
La Fiscalía ha acusado a Zapata de haber obtenido beneficios personales usando oficinas del Ministerio de la Presidencia para negociar con empresarios solo con la supuesta ayuda de su mejor amiga, una funcionaria de rango medio que también está detenida.
En las últimas semanas también ha sido motivo de controversia la existencia de un hijo que la mujer tuvo con Morales en 2007, ya que algunas autoridades afirman que murió y otras niegan que existiera, mientras que Zapata sostiene que el niño está vivo.
Quintana dijo que está a disposición de la Fiscalía para ser interrogado y que entregará su teléfono celular para que se investigue si sostuvo el intercambio de mensajes y se revise el tráfico de llamadas telefónicas con la mujer.
Anunció que hará un esfuerzo económico para contratar un abogado para defenderse de las acusaciones de Zapata, pese a que no tiene los recursos que posee la mujer, que cuenta con varios juristas.
En la carta enviada a Quintana el martes y que fue entregada a los medios, Zapata dice estar sorprendida de que el ministro "olvidó la caballerosidad" con la que se dirigía antes a su persona y de que ahora la llame "vulgar delincuente".
En la misiva, también lo acusa de estar atentando contra la democracia, la ética, la justicia en el país, de ser "el propulsor de traicionar y destruir al hombre (Morales) que le dio su confianza" y de mentir al mandatario y a los bolivianos.
En los mensajes en WhatsApp, que Quintana niega y Zapata ratifica como verídicos, hay varias conversaciones en un tono amoroso en las supuestamente el ministro insiste en verla hasta pactar una cita y ella lo elogia y le llama "mi rey".
La relación de Morales y Zapata fue revelada a principios de febrero por el comentarista de televisión Carlos Valverde, quien expresó su sospecha de que la firma china Camce, donde trabajaba ella, se ha beneficiado con varios contratos millonarios del Estado.
El mandatario ha rechazado las denuncias y ha pedido que sean el Parlamento y la Contraloría General, manejados por el oficialismo, los que investiguen esas denuncias.