BEIJING.- El presidente chino, Xi Jinping, asumió un cargo más directo sobre las fuerzas armadas de su país al convertirse en comandante en jefe de su Centro de Mando de Operaciones Conjuntas. El cargo refuerza su posición como el mandatario chino más poderoso en varias décadas.
La noticia se reveló el miércoles y el jueves en reportes de medios, que mostraban por primera vez a Jinping en público con uniforme de combate de camuflaje y con la insignia del centro de mando.
Durante su visita del miércoles al centro, Xi pidió al personal que "vigile de cerca las tendencias de la revolución militar global y trabaje por construir un sistema de mando conjunto que cumpla la necesidad de combatir y ganar una guerra informatizada", según la agencia oficial de noticias Xinhua.
Los agentes deben "cambiar sus ideas, innovar y abordar dificultades, en un intento de construir un sistema de batalla conjunto que sea absolutamente leal, con recursos en la lucha, eficiente en el mando y audaz y capaz de ganar guerras", dijo Xi, según declaraciones recogidas por Xinhua.
El centro de mando, que según medios se encuentra bajo tierra a las afueras occidentales de Beijing, está bajo una estricta supervisión de la Comisión Central Militar del gobernante Partido Comunista, que está liderado por Xi y supervisa al Ejército de Liberación Popular, el más grande del mundo con 2,3 millones de efectivos.
