WASHINGTON.- El senador y aspirante presidencial de Estados Unidos Bernie Sanders se mostró feliz hoy tras su inesperada victoria en las primarias demócratas de Indiana frente a la ex secretaria de Estado Hillary Clinton y negó que su campaña para lograr la nominación del partido esté acabada.
"La campaña de Clinton cree que esta campaña (la suya) está acabada. Están equivocados. Quizá está acabada para los miembros del aparato del partido, pero los votantes en Indiana tenían una idea diferente", indicó el veterano senador, autoproclamado socialista democrático.
"Estamos en esta campaña para ganarla, y vamos a luchar hasta que se deposite el último de los votos", aseguró Sanders, quien pese a la victoria de hoy sigue estando por detrás de Clinton en número de delegados por un amplio margen.
"Somos conscientes de que tenemos un camino hacia arriba para llegar a la victoria, pero hemos estado luchando hacia arriba desde el primer día de esta campaña", añadió.
Sanders emplazó a los electores en los estados que quedan por votar en las primarias demócratas a comparar su historial y el de Clinton en materias como "la creación de empleo, el incremento del salario mínimo, la guerra y la paz, la necesidad de sanidad para todos, romper los grandes bancos, combatir el cambio climático y otros asuntos críticos".
Además, Sanders también apuntó que nada le gustaría más que enfrentarse "y derrotar a Donald Trump, alguien que jamás debe ser presidente" de EEUU.
Todos los sondeos de opinión que se habían publicado hasta hoy daban a Clinton como ganadora en Indiana, algunas por márgenes tan amplios como 8 o incluso 13 puntos, y los analistas destacaban el buen papel de la ex primera dama en territorios vecinos como Illinois y Ohio, en los que ella ganó.
Sin embargo, Sanders consiguió superar estos pronósticos y se llevó varias de las principales ciudades del estado, entre ellas Fort Wayne, South Bend y la gran mayoría de las zonas rurales.