GINEBRA.- La cancelación de Israel de los permisos de ingreso para palestinos luego de un ataque letal en Tel Aviv podría representar un castigo colectivo que está prohibido bajo la ley internacional, dijo el viernes el máximo funcionario de derechos humanos de Naciones Unidas.
El Ejército israelí revocó el jueves los permisos de 83.000 palestinos para visitar Israel y dijo que enviaría más soldados a la ocupada Cisjordania un día después de un ataque armado palestino que provocó la muerte de cuatro israelíes en Tel Aviv.
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Ra'ad Al Hussein, condenó el ataque pero está profundamente preocupado por la revocación de los permisos, "lo que podría representar un castigo colectivo prohibido, que sólo incrementará la sensación de injusticia y frustración sentido por los palestinos en este momento tan tenso", dijo la portavoz Ravina Shamdasani, en una rueda de prensa.
Las medidas incluyeron la suspensión de 204 permisos de trabajo a individuos de los familiares de los presuntos atacantes y un acordonamiento de toda su ciudad natal por parte de fuerzas de seguridad israelíes, agregó.
"Israel tiene una obligación de derechos humanos de juzgar a los responsables por sus crímenes. Y esto está haciéndose. Sin embargo, las medidas tomadas contra la población castigan no sólo a los perpetradores del crimen sino a decenas, y tal vez cientos o miles, de palestinos inocentes", dijo Shamdasani.
Los permisos de ingreso habían sido emitidos por Israel para los palestinos desde la Cisjordania ocupada para visitar a familiares durante el mes sagrado musulmán del Ramadán, que se está celebrando estos días.
No hubo una adjudicación inmediata de responsabilidad por el ataque perpetrado por dos hombres armados el miércoles en un elegante restaurante y centro comercial cerca del Ministerio de Defensa de Israel, pero Hamas y otros grupos militantes palestinos lo elogiaron rápidamente
Israel cerró todos los accesos con la Franja de Gaza y Cisjordania en reacción al atentado de forma que los palestinos sólo podrán salir en casos de emergencia médica y humanitaria, informó hoy una portavoz del Ejército.
La medida entró en vigor a medianoche y se mantendrá hasta la medianoche del domingo, cuando finaliza la festividad judía de Shavuot.
Ya se había amenazado con las duras medidas tras el atentado perpetrado por dos palestinos en la noche del miércoles, que abrieron fuego en un café del centro de Tel Aviv, matando a cuatro personas e hiriendo a al menos cinco más.
El Ejército estableció hoy un cerco alrededor de Yata, en el sur de Cisjordania, el lugar del que procedían los dos atacantes, que según la policía eran primos. La última vez que Israel bloqueó los territorios palestinos por dos días fue por la pascua judía o Pésaj a finales de abril.