WASHINGTON.- El sospechoso atrincherado en un estacionamiento en Dallas (Texas, EE.UU.) tras el tiroteo en el que han muerto 4 policías, aseguró hoy que ha colocado varias bombas en todo el edificio y en el centro de la ciudad, informó la Policía.
En una rueda de prensa, el jefe de Policía de Dallas, David Brown, explicó que mantienen una negociación con uno de los sospechosos de haber disparado contra 11 agentes, matando a 4 de ellos, en el transcurso de una manifestación en protesta por la violencia policial.
El sospechoso, que ha seguido disparando contra los agentes durante los aproximadamente 45 minutos que llevan negociando, ha indicado que "el fin se acerca" y que más policías resultarán heridos y morirán.
Al margen del sospechoso atrincherado en el aparcamiento, la Policía mantiene en custodia a tres personas, incluyendo a una mujer que fue detenida en el estacionamiento y a otros dos individuos que circulaban por la autopista en un Mercedes.
Estas personas en custodia no están cooperando con las autoridades, según Brown, quien dijo que no tienen la seguridad de que no haya más personas involucradas además de los tres arrestados y el sospechoso atrincherado.
El jefe de Policía explicó que los dos francotiradores que dispararon contra los agentes "querían herir o matar al máximo número posible de policías", por lo que prepararon una emboscada y algunos de los agentes recibieron los disparos por la espalda.
Alrededor de un centenar de agentes habían sido desplegados en el centro de Dallas con motivo de la marcha contra la violencia policial, tras las recientes muertes de dos ciudadanos afroamericanos a manos de agentes de la policía.
Estas manifestaciones se repitieron la pasada noche en numerosas ciudades a lo largo y ancho del país.