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Voces de la extrema derecha: por qué los europeos se alejan de los partidos tradicionales

Seis personas relataron a The New York Times las razones que los llevaron a apoyar a movimientos más radicales en medio de la crisis migratorias que vive el viejo continente. Estos son sus testimonios.

18 de Julio de 2016 | 09:24 | The New York Times
NUEVA YORK.- Hace algunos meses pedimos a los lectores simpatizantes de partidos de extrema derecha en Europa que nos dijeran por qué se habían alejado de los movimientos políticos tradicionales. Recibimos miles de respuestas. La mayoría de ellos mencionaban sus inquietudes frente a la inmigración y un deseo de desafiar a la Unión Europea.

A algunos les inquietaba ser identificados como defensores de la extrema derecha, pues argumentan que simplemente están cuestionando una política hegemónica que no refleja sus creencias o experiencias. Además, muchos de los lectores -la mayoría hombres- no quisieron dar sus nombres por miedo a ser estigmatizados.

Editamos estas respuestas para mayor brevedad y claridad. Debido a que varios de estos asuntos se discuten mucho en toda Europa, proporcionamos un contexto para cada respuesta.

Mikael Jakobsen


24 años, estudiante de Derecho en Aarhus, Dinamarca
Partido: Partido Popular Danés

La política simbólica de "ayudar" a quienes lo necesitan, invitándolos a llegar sin importar las circunstancias ni la situación económica, no ayuda. Nuestra economía no crece al mismo ritmo que lo hace el flujo interminable de inmigrantes. Para ayudar hay que descubrir la causa del problema y resolverla. Es como comprar baldes cuando el techo gotea en lugar de arreglar el techo.

• Dinamarca, al igual que otros países nórdicos, ha comenzado a recortar los beneficios para los inmigrantes tras el aumento de llegadas el año pasado.

• El parlamento, donde el Partido Popular Danés es la segunda fuerza política, aprobó una ley que solicita a los nuevos refugiados entregar objetos de valor para ayudar a pagar su alojamiento.

Oscar Lind


43 años, economista, Estocolmo
Partido: Demócratas de Suecia

Hay tres cosas que me han hecho pensar en votar por los Demócratas de Suecia, a pesar de que los lazos históricos del partido con la supremacía blanca me parecen repugnantes y no concuerdo con su postura anti Unión Europea y anti-OTAN: la inmigración en masa y las fronteras abiertas, la política de la identidad y la propaganda "institucional" de las dos anteriores.

Suecia ha recibido una inmigración masiva en las últimas dos décadas. En lugar de reconocer los problemas relacionados con esta realidad, durante décadas, tanto los partidos dominantes como los medios los han ignorado: los han convertido en responsabilidad del racismo sueco, los han adjudicado a la falta de servicios sociales, o han afirmado que el costo inicial de la inmigración será beneficioso a largo plazo.

¿Por qué un trabajador étnicamente sueco querría votar por partidos que consideran a los "hombres blancos" opresores y que con frecuencia denigran su etnia y su cultura?

• La inmigración en Suecia ha aumentado a un ritmo constante durante los últimos treinta años. El año pasado se le otorgó la residencia a una cantidad de personas casi diez veces mayor a la de 1980. Aunque el crimen ha aumentado en las últimas décadas, la cantidad de delitos denunciados no ha crecido en proporción con la cantidad de inmigrantes.

• La reputación de Suecia como una de las naciones que mejor recibe a los inmigrantes en Europa está siendo cuestionada. Los ataques contra los inmigrantes de Europa del este han aumentado y, con la llegada de personas de Medio Oriente, ha crecido un sentimiento antiinmigración.

Mark Cserepes


24 años, estudiante de Administración en Pecs, Hungría
Partido: Jobbik, Movimiento por una Hungría Mejor

Como adulto joven, me gustaría votar por algo fresco, con poca o ninguna conexión con el régimen anterior. Solo el partido de extrema derecha está hablando de los problemas reales; por ejemplo, los dos partidos mayoritarios prometen resolver los asuntos relacionados con los gitanos (bajos ingresos y educación), pero nunca hacen nada.

Como estudiante de maestría puedo decir que la mayoría de mis amigos, e incluso la mayoría de la gente que conozco, piensa igual que yo. Quieren apoyar algo nuevo, porque ni la Unión Cívica Húngara ni el Partido Socialista funcionan, y quisiéramos ver que el país progresa.

• La retórica antisistema está en el centro de las políticas del movimiento Jobbik. Ganó relevancia durante las protestas callejeras violentas contra el gobierno en 2006.

• Quienes apoyan a Jobbik alaban su postura frontal sobre temas como lo que el partido llama los "criminales gitanos", de quienes dicen que son especialmente propensos a cometer delitos menores. Los estudios señalan que la pobreza y la exclusión social, no la etnia, son el origen de los crímenes.

Samuel Teodosio


28 años, analista de negocios, Lille, Francia
Partido: Frente Nacional

Me gusta Europa y tengo muchos amigos de otros países de Europa, pero esto no cambia el hecho de que yo sienta que no pertenezco a Europa, en particular a la Europa que nos quiere vender el proyecto de la Unión Europea. Pienso que el futuro de Francia está en África y en nuestros vecinos europeos más cercanos, que es algo que abraza el Frente Nacional: una Francia realmente independiente que trabaja para forjar su propio destino. Quizá no adopto todas las soluciones y propuestas del partido, pero todo comienza y termina con la soberanía.

• Bajo el liderazgo de Marine Le Pen, el Frente Nacional se ha separado de su pasado radical y se ha esforzado por captar un electorado más amplio.

• Después de que el Reino Unido decidiera dejar la Unión Europea, Le Pen manifestó su fuerte apoyo al Brexit y pidió llevar a cabo referendos similares en toda Europa.

Robert Meyer


58 años, escritor técnico, Dieburg, Alemania
Partido: Alternativa para Alemania (AfD)

Al ver a 800.000 inmigrantes ilegales vagar por el país, y al ver que Alemania le permite a esta gente ignorar las leyes y hacer lo que le plazca, me di cuenta de que los países que no pueden controlar sus fronteras (o no quieren, debido a ideas ingenuas y equivocada sobre los "derechos humanos") están condenados, a menos que las personas que sí pagan impuestos y hacen que las cosas funcionen tengan voz en el asunto. Se trata de una nueva "mayoría silenciosa" que ha sido intimidada por la prensa liberal y los políticos cobardes. Es tiempo de terminar con esto.

• Más de un millón de migrantes han llegado a Alemania desde el año pasado, pero el gobierno enfatiza que se quedarán muchos menos.

• Una gran cantidad de votantes siente que alojar a inmigrantes en sus comunidades es una carga impuesta por las autoridades, a quienes no les importan las consecuencias de esta realidad.

Werner Farkas


36 años, supervisor de construcciones, Viena
Partido: Partido de la Libertad de Austria (FPÖ).

El candidato del FPÖ, Norbert Hofer, podría convertirse en Presidente en una segunda vuelta de las elecciones que se llevará a cabo este año.

Voté por el FPÖ por muchas razones relacionadas con los extranjeros, aunque en la mayoría de los casos ellos no tienen la culpa. Nuestro gobierno es responsable del odio contra los extranjeros, porque muchos austriacos se sienten ciudadanos de segunda clase en su propio país.

En Austria es obligatorio que los jóvenes hagan el servicio militar. Si no has terminado tu servicio militar, es casi imposible conseguir un empleo. Así que cuando tuve que dejarlo por problemas de presión arterial, me vi obligado a solicitar asistencia social. Como no había trabajado antes, sólo obtuve el mínimo: 313 euros al mes. Los refugiados en cambio reciben 700 euros mensuales.

• El año pasado casi 90.000 personas solicitaron asilo en Austria, un país de 8,6 millones de habitantes: tres veces más que el año anterior y la cifra más grande desde 1956-1957, cuando 170.000 húngaros, que huían de las represalias soviéticas, cruzaron la frontera.

• Austria brinda asistencia social a los residentes legales y a las personas con estatus de refugiado: los ayuda con hasta 837 euros (925 dólares) al mes. Quienes piden asilo y están esperando el veredicto reciben un máximo de 320 euros (354 dólares).
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