SANTIAGO.- "Las observaciones del canciller de Bolivia son muy extrañas. Se preocupa en Chile de los camioneros bolivianos, y hoy en Bolivia hay un paro nacional de camioneros protestando por demandas laborales, tributarias, hay transportistas presos por un paro de mayo". Con estas palabras, el canciller chileno, Heraldo Muñoz, criticó la visita de su par altiplánico, David Choquehuanca, a los puertos de Arica y Antofagasta.
Y los cuestionamientos del jefe diplomático chileno a la comitiva altiplánica que visitó ambas ciudades nortinas pasa porque, mientras el grupo liderado por Choquehuanca ha denunciado presuntas irregularidades y abusos a los camioneros bolivianos en los terminales portuarios del norte de Chile, estos últimos están llevando a cabo un paro de actividades que ya va en su segundo día.
Así, durante el lunes se pudo ver cortes de carreteras y bloqueos en diferentes caminos del país, con enfrentamientos entre manifestantes y las fuerzas policiales. El saldo: 17 detenidos en Chuquisaca y 22 en Santa Cruz, además de dos heridos.
Ante esto, el Gobierno boliviano buscó siempre bajarle el perfil, asegurando que las carreteras fueron rápidamente despejadas. Incluso, el vicepresidente, Álvaro García Linera, calificó la manifestación como "un contrasentido" que "tiene hasta rasgos antipatriotas", al realizarla en coincidencia con el viaje de Choquehuanca a Chile.
Las demandas
Las discrepancias entre el Gobierno de Morales y los transportistas datan de varios meses, producto de las diversas demandas de estos últimos, las que se centran en cuatro reformas al sistema de tributación: eliminación de las facturas, prescripción de multas impositivas de ocho a cuatro años, reposición de facturas de combustible y eliminación de las deudas hereditarias.
Así, a lo largo de las últimas semanas, los camioneros han protagonizado diversas protestas y cortes de caminos en ]Bolivia, mientras aún no se ha podido llegar a un acuerdo con los representantes del Ejecutivo.
Sin embargo, todo se agudizó con la orden de prisión preventiva de parte de la justicia de ocho dirigentes camioneros de Chuquisaca, acusados de causar daños económicos a la fábrica estatal de cemento Fancesa con protestas realizadas en sus dependencias en junio pasado.
Esto ha causado la indignación de los transportistas, por lo que la Confederación del Transporte Pesado Nacional de Bolivia (Ceatpenal) llamó a una paralización en todo el territorio del país, acusando una persecución, mientras que desde el Ejecutivo han señalado que no pueden interferir en las decisiones de la justicia.
No obstante, según informa el diario La Razón, este miércoles los dirigentes camioneros se reunirán con representantes del Gobierno en el Mibnisterio de Economía, donde se podría llegar a un acuerdo después de meses de conflicto.
