CARACAS.- El Parlamento venezolano, controlado por mayoría opositora, aprobó hoy una declaración sobre la "grave crisis de salud" que atraviesa la nación caribeña y exigió al presidente de ese país, el chavista Nicolás Maduro, aceptar la ayuda humanitaria ofrecida por otros países para atender esta situación.
El diputado opositor William Barrientos que presentó el denominado "Proyecto de acuerdo sobre la grave crisis que atraviesa el sistema nacional público de salud" aseguró que todos los legisladores, incluyendo a los de la bancada oficialista, "saben" que se ha agudizado el problema sanitario en el país.
Barrientos señaló que en los últimos años ha habido un recrudecimiento de enfermedades "propias de la pobreza" entre las que citó la sífilis y la tuberculosis, y ubicó en 85 por ciento la escasez de medicamentos e insumos (materiales) médicos en Venezuela.
El pleno de diputados guardó un minuto de silencio en la Cámara por los niños, adultos y jóvenes que, según la oposición, "han muerto fruto de la desidia desde el punto de vista sanitario que ha habido en el país a lo largo de estos últimos años".
Tras ello, la doctora Dora Colmenares del Hospital Universitario de Maracaibo, ubicado en el occidental estado Zulia, tomó la palabra y describió la "emergencia absoluta" en que, según sus palabras, se encuentra el centro de salud.
Explicó que el récord de intervenciones quirúrgicas diarias del hospital pasó de 70 a 20, que nueve de cada díez pacientes presentan desnutrición de leve a moderada y que las unidades de cateterismo, rayos X y banco de sangre están inoperantes.
La doctora considera que si el gobierno venezolano acepta las medicinas gratuitas ofrecidas por la comunidad internacional se comenzaría a solventar la crisis, por lo que el Parlamento exigió a Maduro permitir que ingrese esa ayuda humanitaria "como medida que a corto plazo ayudaría a mejorar el sistema de salud".
Por su parte, el diputado Gilberto Pinto, único oficialista que intervino en este debate, sostuvo que el sistema público de salud ha desmejorado por la falta de divisas que hay en el país caribeño y que se debe a la caída de los precios petróleo, su principal fuente de financiación, según dijo.
"El tema de la salud es uno de los que el pueblo venezolano lo considera como un patrimonio, por ese robusto sistema de salud pública (...) hay dos modelos, uno público y preventivo de la revolución y otro privatizado y mercantilista", ponderó el chavista.
Pinto, en nombre de la bancada del Gobierno, reiteró que los actos del Parlamento "carecen de todo tipo de legalidad" luego de que incorporaran en la Cámara a tres diputados suspendidos por el Supremo en diciembre, razón por la que la máxima instancia judicial declaró al Legislativo en desacato.