LA PAZ.- La justicia boliviana ordenó la noche del domingo la reclusión en prisión de tres mineros más al ser imputados por el asesinato del viceministro de Régimen Interior, Rodolfo Illanes, con lo que todos los detenidos por el caso suman nueve.
La Fiscalía de La Paz indicó en un comunicado que el minero Agustín Choque será recluido en el penal de máxima seguridad andino de Chonchocoro y que Clemente Colque y Paulino Layme irán a la cárcel de Patacamaya, situada en el altiplano.
Los mineros están acusados de asesinato, robo agravado, organización criminal, tenencia y porte o portación ilícita de explosivos y atentados contra miembros de organismos de seguridad del Estado.
En la madrugada del domingo, una jueza ya había ordenado la prisión de otros seis mineros, entre ellos el presidente de la Federación Nacional de Cooperativas Mineras (Fencomin), Carlos Mamani, también acusados por la supuesta comisión del delito de asesinato .
Con ese fallo, en Chonchoro estarán recluidos Mamani, Carlos Castro, René Cochi, Roberto Durán y Silvestre Flores, mientras que Julián Pinto también será internado en la cárcel de Patacamaya.
En todos los casos, la imputación de la Fiscalía señala que Illanes fue asesinado el jueves pasado tras haber sido secuestrado por mineros cuando se dirigió al bloqueo de rutas en la localidad de Panduro, a 180 kilómetros de La Paz para mediar en el conflicto.
Los mineros "secuestraron al viceministro para llevarlo a la comunidad de Belén en el cerro Pucara, donde con alevosía, ensañamiento y premeditación le quitaron la vida a golpes", según un pronunciamiento de la Fiscalía difundido el sábado.
La autopsia practicada a Illanes reveló lesiones en los centros nerviosos superiores, una lesión vascular y nerviosa, hemorragia subdural, edema cerebral, traumatismo cráneo encefálico y politraumatismo facial, torácico, genital y de extremidades.
Illanes fue torturado durante seis o siete horas antes de morir, según los exámenes realizados a su cadáver.
Una multitud despidió el domingo el cadáver del viceministro cuando fue enterrado en el Cementerio General de La Paz.
El conflicto también causó la semana pasada la muerte de cuatro mineros, tres de ellos por disparos de armas de fuego y uno por manipulación de explosivos, confirmaron las autoridades.
El Gobierno afirmó que todas las muertes serán aclaradas, pero también ha insistido en que los agentes policiales no tenían órdenes de portar armas letales en el desbloqueo de las carreteras.
Con sus protestas, los mineros de Fencomin exigían la anulación de una ley que permite la formación de sindicatos en las cooperativas, lo cual consideran perjudicial para esas entidades.
El Presidente Evo Morales dijo el sábado que está convencido de que ha vuelto a derrotar "un golpe de Estado", esta vez supuestamente planeado por los mineros que protagonizaron el conflicto.