MADRID.- Los socialistas españoles (PSOE) votarán contra la investidura de Mariano Rajoy (PP, centroderecha) como presidente del Gobierno por una gestión en su anterior mandato basada en la corrupción y el incremento de la desigualdad.
El líder del PSOE, Pedro Sánchez, subrayó hoy el "no" a Rajoy durante el debate de investidura de Rajoy que se celebra en el Congreso, donde los 350 diputados que conforman la cámara votarán hoy a favor o en contra de la investidura del candidato conservador.
Después de que ayer Rajoy expusiera su programa de gobierno en la primera jornada del debate, Sánchez subió hoy a la tribuna del Congreso para ratificar su rechazo al jefe del Ejecutivo español.
Desde 2011, cuando Rajoy fue investido jefe del Gobierno, su gestión se ha caracterizado, a juicio del líder socialista, por contribuir a la desigualdad, con recortes sociales.
Y desde el punto de vista económico, por elevar la deuda pública hasta más del cien por ciento del PIB, por reducir el volumen del depósito de las pensiones y por incrementar el déficit público hasta ser el mayor de la Unión Europea.
"No podemos apoyar aquello a lo que nos enfrentamos", dijo Sánchez, quien acusó a Rajoy de ser el líder de "un partido imputado" por corrupción, en alusión al proceso judicial que se sigue contra el PP.
Por eso Rajoy "no puede orientar la regeneración democrática", en opinión del líder del PSOE, para quien "España necesita un Gobierno, pero no un mal Gobierno".
Los 85 diputados del PSOE votarán contra Rajoy por "coherencia con su ideario", por "compromiso con sus votantes" y por "el bien del país".
Criticó el "maniqueísmo" del candidato conservador por afirmar que si no es elegido España caerá "en el caos" y tendrá que haber elecciones en diciembre, las terceras en un año.
A este debate Rajoy llega con los 137 escaños de su partido, más 32 de Ciudadanos (liberales) y uno más de una parlamentaria canaria, lo que supone 170, a seis de la mayoría absoluta necesaria.
En contra tiene 180 diputados, por lo que la derrota de la candidatura de Rajoy, dentro de unas horas, llevará a una segunda votación el viernes 2 de septiembre, en la que le harían falta más síes que noes, aunque es probable que también sea rechazado.