LONDRES.- La Primera Ministra británica, Theresa May, dejó claro este miércoles que no convocará un segundo referéndum sobre la Unión Europea (UE) al celebrar una reunión con sus ministros, la primera tras el receso de verano y centrada en el Brexit.
La líder conservadora reunió a su Gobierno en la residencia campestre de Chequers, a las afueras de Londres, antes de que la próxima semana se reanuden las sesiones del Parlamento británico.
Durante el encuentro, la jefa del Gobierno insistió en que "Brexit significa Brexit" y que rechazará cualquier intento "por la puerta de atrás" para que el Reino Unido permanezca en el bloque europeo, en clara referencia a una segunda consulta.
El Reino Unido votó a favor de salir de la Unión en el histórico referéndum celebrado el pasado 23 de junio, lo que forzó la dimisión del conservador David Cameron como Primer Ministro, sustituido semanas después por May, antigua ministra de Interior.
"Vamos a mirar los próximos pasos que necesitamos tomar y también las oportunidades que se nos presentan mientras forjamos un nuevo papel del Reino Unido en el mundo", dijo May a sus ministros ante la prensa antes de que la reunión continuara a puerta cerrada.
Ante los comentarios de algunos políticos este verano sobre si el Reino Unido debería convocar un segundo plebiscito, la política "tory" dijo: "Tenemos que seguir siendo muy claros de que Brexit significa Brexit, y que haremos de él un éxito".
"Esto significa que no habrá un segundo referéndum, ningún intento de permanecer en la UE por la puerta de atrás, y que vamos a cumplir con esto", puntualizó la Premier.
Según fuentes oficiales, el objetivo de la reunión era evaluar los pasos a seguir en relación al Brexit, después de que May pidiera a los ministros antes de las vacaciones que estudiaran las oportunidades de la salida de la UE para sus departamentos.
La líder conservadora indicó que no tiene intención de activar este año el artículo 50 del Tratado de Lisboa, que establece un proceso de negociaciones de dos años sobre los términos de la retirada de un país miembro del bloque europeo.
May dijo hoy en la mansión de Chequers que ya se "ha trabajado bastante" para preparar las futuras negociaciones.
"Tenemos la oportunidad de forjar una nueva labor positiva para el Reino Unido en el mundo" y que toda la población pueda "compartir la prosperidad", subrayó.
No obstante, reconoció que hay "desafíos" por delante y que el Reino Unido vive momentos "importantes y significativos", puesto que aún se desconoce cuál será la relación que tendrá el país con sus socios comunitarios una vez materializada la salida de la UE.
Según los medios británicos, hay divisiones entre ministros sobre el futuro de la relación británica con Europa, pues algunos parecen estar a favor de que el Reino Unido tenga pleno acceso al mercado único y otros que prefieren no estar en él.
Entre los presentes hoy figuran tres destacados políticos a favor del Brexit, el ministro de Relaciones Exteriores, Boris Johnson; el titular de Comercio Internacional, Liam Fox; y el llamado ministro para la Salida de la UE, David Davis.
Según los medios, los tres celebraron la semana pasada conversaciones privadas ante los presuntos desacuerdos en el Gobierno sobre la futura relación del Reino Unido con la UE.
La Primera Ministra, que ya se ha reunido con varios líderes europeos para abordar el Brexit, participa este fin de semana en la reunión del G20 que se celebrará en China, su primera gran prueba ante la comunidad internacional tras asumir el poder el mes pasado.