HANGZHOU.- La determinación de la Unión Europea (UE) que obliga a Apple a pagar un enorme cargo impositivo a Irlanda se basó en hechos y reglamentos existentes y no fue una decisión contra Estados Unidos, según el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker.
La semana pasada, los reguladores antimonopolio de la Unión Europea ordenaron a Apple pagar hasta 14.500 millones de dólares en impuestos al Gobierno irlandés tras dictaminar que infringió la norma que prohíbe a los estados miembros del bloque dar ventajas injustas a algunas empresas.
El presidente ejecutivo de Apple, Tim Cook, manifestó la semana pasada que esa decisión era "una basura política total", pero Francia y Alemania han manifestado su respaldo a Bruselas tras la determinación.
Juncker afirmó que las investigaciones sobre impuestos de la Comisión Europea habían sido dirigidas principalmente a empresas europeas. "Esta no es una decisión contra Estados Unidos de América", aseguró.
La decisión fue adoptada en el contexto de una iniciativa global coordinada para evitar la evasión fiscal de empresas multinacionales, liderada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), con sede en París.