PEKÍN.- China denunció la noche del viernes el cruce de un buque de guerra estadounidense cerca de una zona disputada del mar de China meridional y evocó un "acto ilegal grave" y "deliberadamente provocador".
El ministerio de Defensa chino indicó en un comunicado publicado en su página internet que dos buques chinos habían disuadido a un navío estadounidenses continuar su ruta tras haber ingresado "en aguas territoriales chinas" cerca de las islas Paracel.
China controla todas las islas Paracel, reivindicadas por Vietnam y Taiwán.
"El ingreso (del buque estadounidense) en las aguas territoriales chinas es un acto ilegal grave y un acto deliberadamente provocador", según el comunicado.
En un comunicado separado, el ministerio de Relaciones Exteriores chino declaró que el acto de Estados Unidos "viola gravemente la soberanía y los intereses de seguridad de China" así como "las leyes chinas e internacionales".
El Pentágono indicó el viernes que había enviado al destructor "USS Decatur" cerca de las Paracel, precisando que el buque no ingresó a menos de las 12 millas náuticas de los islotes (límite que define las aguas territoriales) pero que sí cruzó por una parte del océano que reclama China.
El destructor respetó "el procedimiento habitual y legal, sin ser escoltado por otros buques y sin incidentes", según el Pentágono.
China reivindica la casi totalidad del mar de China meridional, incluso las zonas muy cercanas a las costas de numerosos países del sudeste asiático. Pekín lanzó operaciones para construir islotes artificiales y bases militares en minúsculos arrecifes disputados.
Esta es la tercera operación de Estados Unidos desde principios de 2016 para la "libertad de navegación". Washington subrayó en numerosas ocasiones que ignoraría las pretensiones marítimas "excesivas" de China.
Es además el primer buque de EE.UU. que navega en la zona desde la decisión de la Corte Permanente de Arbitraje de La Haya que en julio estimó que China no tenía un derecho legítimo a la casi totalidad de ese mar.