SANTIAGO.- El líder del partido de Izquierda Verde GroenLinks, Jesse Klaver, sorprendió el miércoles en las elecciones holandesas al salir como uno de los vencedores y permitir que su colectividad ronde los 14 escaños en el Parlamento, diez más que en los comicios de 2012.
El resultado fue inesperado debido a que toda la atención se encontraba entre el candidato oficialista, Mark Rutte, y su posible reelección y el ultraderechista Geert Wilders, líder del Partido por la Libertad (PVV), quién sembró alguna duda durante la campaña electoral de ser el nuevo gobernante.
Sin embargo, la noticia fue Klaver, este político de sólo 30 años que inició su carrera en 2009. Fue miembro de la Cámara de Representantes desde 2010, misma época en la que fue elegido por los periodistas nacionales como el "talento político del año".
Luego, en mayo de 2013 se casó –tiene dos hijos- y el 12 de mayo de 2015 asumió como el líder más joven de GroenLinks.
Fue así como este miércoles logró el mejor resultado de la historia de la Izquierda Verda en una elección general, superando los 12 escaños obtenidos en 1998. Además, logró que su partido fuera el más votado en Amsterdam.
Parecidos internacionales
Klaver ha sido considerado por algunos como un joven Justin Trudeau -Primer Ministro de Canadá- de la política holandesa e inclusive se le ha comparado con una nueva versión de John F. Kennedy, el cual según el mismo líder del partido ecologista, es una fuente de inspiración.
Se le relaciona con el Mandatario canadiense por ser carismático, progresista y por sus ideales de inmigración. Klaver, quien es hijo de un holandés de origen marroquí y una holandesa con raíces en Indonesia, dijo durante su campaña a sus partidarios que "no vamos a recibir a todos los refugiados del mundo, porque es imposible, pero tampoco los vamos a dejar morir en el mar. Como Europa, debemos trabajar por encontrar una solución".
Sus ideas políticas
A pesar de no haber salido ni primero ni segundo en las elecciones, su mensaje está en la búsqueda de la integración de los inmigrantes y las políticas sociales en Holanda. "Tenemos que actuar de tal manera que Europa funcione para todo el mundo, no sólo para un pequeño grupo de ricos que tuvieron suerte y que lo único que harán será enriquecerse aún más", enfatizo.
La cabeza de GroenLinks asegura que sabe lo que es crecer en Holanda teniendo raíces de otros países. Al contrario de lo que "ciertos políticos quieren hacernos creer, Holanda es un país de inmigración", declaró en una entrevista, haciendo alusión a su contrincante en las elecciones, el diputado de extrema derecha Geert Wilders, conocido por sus declaraciones contra el islam.
Por otro lado, una de las propuestas más llamativas de su campaña estuvo relacionada con la imposición de cuotas femeninas en el Parlamento. "No es aceptable que haya más hombres que mujeres representando este país", advirtió, con los datos en la mano.
Esto, considerando además que la presencia femenina en las elecciones fue casi nula, ya que la única mujer que lideró un partido fue Sylvana Simons, afrodescendiente y fundadora del partido DENK que también propuso liderar la fuerza contra el antiislamismo de Wilders.
El día de las votaciones, Klaver subió a su cuenta de Twitter un mensaje que decía: "Para una Holanda más limpia, más justa y más empática. #Voteporelcambio".
Es ese cambio el que ahora quiere liderar Klaver, ya con un colchón político mucho más grande y una presencia que le permitirá notarse en el Parlamento holandés.