LIMA.- La justicia peruana, tras más de quince horas de debate, aplazó a la tarde del jueves su decisión sobre el pedido de prisión preventiva para el ex Presidente Ollanta Humala y su esposa por presuntos aportes irregulares de la brasileña Odebrecht a su campaña electoral en 2011.
"A las 15:00 voy a dictar sentencia del pedido del fiscal de prisión para el ex Mandatario Ollanta Humala y su esposa", informó el juez Richard Concepción Carhuancho tras levantar la audiencia.
La audiencia se inició con la sustentación del fiscal Germán Juárez, que pide cambiar las medidas cautelares que pesan actualmente contra el ex Mandatario, como la prohibición de viajar al extranjero sin permiso judicial, por "prisión preventiva de 18 meses" ante el riesgo de fuga o demanda de asilo.
El fiscal argumentó que "hay nuevos elementos que probarían que Humala y su esposa, Nadine Heredia, están involucrados en el presunto delito de lavado de activos y por lo tanto existe peligro de fuga".
"No hemos escuchado un solo elemento que pueda cambiar la situación del ex Presidente Humala y su esposa, solo hay referencias, indicios, afirmación de colaboradores que muchos de ellos han sido aclarados en su momento", rebatió por su lado Wilfredo Pedraza, abogado de Nadine Heredia.
"No existe un propósito de fuga del ex Presidente ni de su esposa. Ellos están cumpliendo con todas las citaciones del fiscal, nos se han movido del país", dijo a su vez Julio Espinoza, defensor del Humala.
Los abogados entregaron al juez los pasaportes de Humala y de Heredia "como una señal clara que no existe intención de fuga".
El ex jefe de Estado y su esposa desistieron de presenciar la audiencia por recomendación de sus abogados, en una actitud tolerada por la legislación.
"Es decisión de sus patrocinados si asisten o no a la audiencia", dijo el juez.
Los defensores de Humala y Heredia habían solicitado aplazar la sesión para tener tiempo de evaluar mejor los argumentos de la fiscalía, pero el juez rechazó el pedido.
El fiscal Juárez imputa a la pareja, fundadores del Partido Nacionalista en 2005, los presuntos delitos de "lavado de activos y asociación ilícita para delinquir" en la recolección de fondos para financiar las campañas electorales de Humala en 2006 y la que lo llevó al poder en 2011.
Según la fiscalía, Odebrecht entregó tres millones de dólares en 2011 a la campaña de Humala, lo que el expresidente niega, aunque recuerda que la ley peruana no prohíbe recibir aportes del extranjero.
En el caso de la campaña de 2006, el fiscal asegura que Humala recibió aportes de Venezuela.