SANTIAGO.- Un dibujo de
Donald Trump en un fondo de color rojo, gritando con un megáfono que asemeja una capucha del Ku Klux Klan. No hay letras, sólo aparece el Presidente de Estados Unidos vociferando. Esa es la última ilustración que cubre la portada del influyente semanario británico
The Economist, que en su interior hace un juicio categórico del Mandatario, al calificarlo de "políticamente inepto".
La reacción surge luego del accionar que ha tomado el líder de la Casa Blanca tras la muerte de una mujer que fue atropellada cuando protestaba en contra de una manifestación de supremacistas blancos en Charlottesville, Virginia, el sábado pasado. A raíz de este hecho, Trump sólo se limitó a decir que la violencia venía "de todos los lados", y tuvieron que pasar dos días y numerosas críticas tanto de demócratas como republicanos para que cambiara su opinión y rechazara a grupos como el Ku Klux Klan (KKK) o movimientos neonazis. Sin embargo, un día después moderó nuevamente sus dichos.
Así, en un adelanto de su edición que saldrá este sábado 19 de agosto, The Economist titula que, después de lo de Charlottesville, quedó demostrado que "Donald Trump no tiene idea de lo que significa ser presidente". Es más, recalca que con decir que había culpa de "ambos lados" tras lo ocurrido el fin de semana, el Mandatario "no dejó ninguna duda de cuál de esos lados se encuentra más cerca de su corazón".
"El señor Trump no es un supremacista blanco. Repitió sus críticas a los neonazis y habló en contra del asesinato de Heather Heyer. Aún así, su inestable respuesta contiene un terrible mensaje para los estadounidenses. Lejos de ser el salvador de la República, su Presidente es políticamente inepto, moralmente estéril y temperamentalmente impropio para el cargo", recalca el medio.
Respecto a la presunta "ineptitud" del Presidente estadounidense, la publicación dice que "esta semana ha fracasado con las pruebas políticas más simples: encontrar una manera de condenar a los nazis. Tras haberse equivocado en su primera conferencia de prensa el sábado, el Sr. Trump dijo lo que se necesitaba el lunes y luego deshizo todo su buen trabajo el martes, uniendo brevemente Fox News y Mother Jones en sus críticas. A medida que los líderes empresariales comenzaron a renunciar en masa de sus paneles asesores, la Casa Blanca los disolvió. Sin embargo, el Sr. Trump obtuvo el respaldo de David Duke, ex Mago Imperial del Ku Klux Klan".
De esta forma, el semanario afirma que Trump ha complicado su tarea de contener las marchas racistas y mantener la paz, daño que, asegura, también se extenderá a su agenda presidencial.
"La ineptitud política de Trump proviene de un fracaso moral. Algunos contramanifestantes eran de hecho violentos, y el señor Trump podría haber incluido palabras duras contra ellos en alguna parte de sus observaciones. Pero igualar la protesta y la contraprotesta revela su superficialidad", recalca.
Todo esto, según la publicación, tiene una raíz: "el temperamento del señor Trump", puesto que "en tiempos difíciles, un Presidente tiene el deber de unir a la nación. Trump lo intentó en la rueda de prensa del lunes, pero no pudo sostener el esfuerzo ni siquiera por 24 horas porque no puede superarse (...) En lugar de comprender que su trabajo es honrar la oficina que heredó, el Sr. Trump se preocupa sólo de honrarse a sí mismo y tomar el crédito por sus supuestos logros".
"Este es un momento peligroso. Estados Unidos está dividido en dos. Después de amenazar la guerra nuclear con Corea del Norte, pensando en invadir Venezuela y equivocarse sobre Charlottesville, el Sr. Trump todavía tiene el apoyo de cuatro quintos de los votantes republicanos. Tal popularidad hace que sea aún más difícil para el país unirse", lamenta The Economist.
Es por ello que, afirma el medio, es responsabilidad de los republicanos, el propio partido de Trump, de "frenar los peores instintos" del Presidente, tanto en la Casa Blanca como en el Congreso.
"Los republicanos pueden frenar a Trump si así lo desean. En vez de entregarse a sus ultrajes en la esperanza de que algo bueno vendrá de él, deben condenarlo", finaliza.