WASHINGTON.- Era agosto de 2016 y sonaba el himno nacional antes de un partido de pretemporada en la NFL. Colin Kaepernick, entonces mariscal de campo de los San Francisco 49ers, hincó la rodilla en el suelo en vez de ponerse en pie.
"No voy a levantarme para mostrar orgullo por una bandera de un país que oprime a la gente negra", explicó después el deportista, que es mestizo. "Tal vez debería buscarse un país que se adapte mejor a él", replicó Donald Trump, que en ese entonces era candidato del Partido Republicano a la Presidencia de Estados Unidos.
Ahí comenzó una polémica que, un año después, se ha convertido en el nuevo flanco del actual Mandatario norteamericano y que lo mantiene en medio de una guerra desatada con una parte importante del mundo del deporte. A continuación te contamos lo que debes saber.
Trump embiste contra la NFL
Tras su protesta en 2016, Kaepernick fue respaldado e imitado por algunos de sus compañeros de la Liga Profesional de Fútbol Americano (NFL) en la que, según consigna la BBC, más del 60% de los jugadores son afroestadounidenses. Así, las manifestaciones durante el himno nacional se hicieron protagonistas en la temporada 2017.
Ante ello, durante uno de sus actos de campaña realizado el viernes pasado, Trump calificó de "hijos de p.." a los jugadores de la NFL. "¿No amarían que los dueños de uno de estos (equipos) de la NFL, al ver que alguien le falta el respeto a nuestra bandera, diga: 'Saquen a ese hijo de p... de la cancha ahora mismo: está despedido'?", dijo. Tras ello, en Twitter, invitó a los seguidores del deporte a no acudir a los estadios hasta que los jugadores abandonen dicha práctica.
El Código de Bandera de EE.UU.
Aunque no tiene carácter legal, el Código de Bandera es ampliamente respetado en el país cuando suena el himno nacional. Establece que los presentes se pongan en pie y miren de frente a la insignia nacional; los civiles lo hacen con la mano derecha en el corazón, los militares haciendo el saludo castrense.
"Valientes patriotas han luchado y muerto por nuestra gran bandera americana. ¡Debemos honrarla y respetarla!", tuiteó este fin de semana el Mandatario. "Los jugadores son animados pero no obligados a estar en pie mientras suena el himno nacional", aseguró la NFL hace un año cuando Kaepernick abrió la polémica.
Ayer, Trump escaló y aseguró que quiere ir más allá. "La NFL tiene todo tipo de reglas y reglamentos. Su única salida es establecer por norma que no se puedan arrodillar durante el himno nacional", afirmó a través de su cuenta personal de la red social Twitter.
La reacción de la NFL
Luego de las polémicas palabras del Presidente, numerosos jugadores que hasta ese momento no habían protestado respondieron hincando la rodilla en el suelo, entrelazando las manos entre ellos o quedándose en el vestuario mientras sonaba el himno. Propietarios de equipos salieron al campo para unirse y respaldar a sus jugadores, entre ellos, Shahid Khan, dueño de los Jaguars, quien donó un millón de dólares a la campaña de Trump en 2016.
Robert K. Kraft, dueño de los Patriots, amigo de Trump y también generoso donante durante su carrera a la Casa Blanca fue otro de los que reaccionó. "Estoy en desacuerdo profundo con el tono de los comentarios hechos por el Presidente", dijo, y expresó apoyo a los jugadores. Roger Goodell, presidente de la NFL, también criticó al Mandatario. "Comentarios divisorios como estos demuestran una desafortunada falta de respeto a la NFL, a nuestro gran deporte y a todos nuestros jugadores”, dijo.
La polémica salta al básquetbol
El destacado basquetbolista Stephen Curry, de los Golden State Warriors, se incorporó a la disputa luego de que afirmara estar evaluando no acudir a la Casa Blanca junto a su equipo, al que Trump iba a recibir como campeón vigente de la NBA.
El Presidente retiró la invitación a todo el conjunto a través de un tuit. "Ir a la Casa Blanca es considerado un gran honor para el equipo campeón. Stephen Curry está dudando, ¡por eso se retira la invitación!", escribió. "Ir a la Casa Blanca era un gran honor hasta que tú apareciste", respondió en la misma red social LeBron James, tres veces campeón de la NBA.
El béisbol y los artistas también se sumaron
Bruce Maxwell, receptor del equipo de beisbol Oakland Athletics, se arrodilló el sábado por la noche mientras sonaba el himno nacional. Fue el primer jugador de las Grandes Ligas en hacerlo.
Pero el mundo del deporte no se quedó solo y varios artistas les entregaron su apoyo. Tal es el caso de los cantantes Stevie Wonder y Pharrell Williams, quienes también se arrodillaron durante la entonación de la canción emblema en sus respectivos conciertos.
Otros que dieron su respaldo mediante escritos y publicando con el hashtag #TakeTheKnee en sus redes sociales fueron los músicos John Legend, John Mayer y P. Diddy; el realizador Michael Moore y los actores Samuel L. Jackson, Mark Hamill (Star Wars), Zoë Kravitz (Big little lies) y Uzo Aduba (Orange is the new black); la escritora JK Rowling y la presentadora Ellen DeGeneres.
La postura de la sociedad estadounidense
Las encuestas han mostrado hasta ahora que la mayoría de los ciudadanos desaprobaba las protestas de Kaepernick y los demás jugadores durante el himno nacional. Analistas creen que Trump pudo decidirse a atacar e insultar a los jugadores para sacar provecho político de esta división.
Hace un año, cuando Kaepernick comenzó a protestar, las expresiones de censura y crítica fueron mayoritarias. Hubo quien quemó la camiseta con el número del quaterback y quien pidió que ahí acabara su carrera profesional. Al día de hoy, Kaepernick no tiene equipo. Unos lo atribuyen al declive deportivo del hombre que en 2013 llevó a San Francisco a la final del Super Bowl; otros, a su forma de protesta.
