SANTIAGO.- La secretaría general de la Organización de Estados Americanos (OEA) reafirmó sus cuestionamientos a la intención del oficialismo boliviano de postular a la reelección al Presidente Evo Morales en los comicios de 2019, pese a que esa opción fue rechazada por la ciudadanía en el referéndum constitucional celebrado en 2016.
Esto ocurrió durante la sesión extraordinaria del organismo celebrada este miércoles en su sede en Washington, a la que asistió una comitiva de ministros de Bolivia encabezada por el titular de Justicia, Héctor Arce.
En su alocución, el secretario de Estado cuestionó el mensaje publicado por el secretario general de la OEA, Luis Almagro, en su cuenta de Twitter el pasado 22 de septiembre, donde aseguró que Evo Morales "deberá respetar decisión popular que dijo NO a reelección", agregando que "ningún juez puede levantar el dictamen del único soberano: el pueblo".
Así, Arce defendió la decisión de Morales de buscar la reelección y aseguró que "Bolivia vive en la más absoluta democracia".
"Existen (en la región) fuerzas políticas conservadoras y retrógradas asentadas en un fundamentalismo racial encubierto que han iniciado una campaña contra esta acción (el mecanismo para buscar la reelección de Morales), que se defiende por sí misma, para satanizar la imagen del Gobierno boliviano", argumentó.
"Es lamentable que estos grupos hayan encontrado en Almagro un portavoz y lazarillo político para intervenir" en la política boliviana, denunció.
Al respecto, quien respondió en nombre de Almargro -que no participó en la sesión- fue su jefe de gabinete, Gonzalo Koncke, quien afirmó que el tuit del jefe de la OEA se dio en un marco de "respeto a la voluntad popular expresada de acuerdo con las normas que regulan el estado de derecho".
Asimismo, expresó que "desde el día en que asumió funciones, el secretario general Almagro ha reafirmado que es su obligación indeclinable velar por el cumplimiento de la carta de la OEA y de las demás normas interamericanas que nos regulan. Velar por estos instrumentos es deber del secretario general, pero también su obligación y su derecho".
"No hay democracia sin respeto a la Constitución, a los procedimientos allí previstos y a las decisiones que de conformidad con ellos tomó el pueblo de Bolivia", recalcó.
Así, respecto a que esta decisión podría "violentar" el derecho de un ciudadano a ser elegido en una votación democrática, "esta interpretación, cuando va contra una decisión libre del soberano, de acuerdo a normas previamente acordadas, parecería no tener sustento".
"Se puede sostener que nuestras constituciones cuando establecen condiciones para la presentación de los candidatos y cuando fijan las formas para sus reformas y ello no convence al pueblo, se ajusta al respeto pleno del derecho de los electores y los posibles elegidos", enfatizó.
Y remarcó: "El pleno ejercicio de la democracia y el respeto del estado de derecho es un derecho humano que estamos obligados a respetar y hacer respetar".