SOCHI/TEHERÁN.- El Presidente sirio, Bashar al-Assad, visitó y se reunió de forma inesperada en la ciudad turística de Sochi, junto al mar Negro en Rusia, con el Mandatario Vladimir Putin, quien aseguró que la guerra en el país árabe está terminando.
El Presidente ruso destacó en el encuentro, celebrado el lunes, que las acciones militares en Siria "ahora sí se están acercando al final" y que, por tanto, es necesario iniciar los procesos políticos.
Asimismo, en una cita sostenida este martes con el Presidente checo, Milos Zeman, Putin destacó que las tropas gubernamentales sirias ya controlan "más del 98% del territorio" del país. "Aún hay focos de resistencia, pero desaparecen rápidamente en los ataques de nuestras Fuerzas Aeroespaciales y de los aliados sirios", agregó.
Según el Kremlin, el encuentro con Al-Assad, ocurrido el lunes, se organizó para coordinar los esfuerzos de paz que se llevarán a cabo el miércoles en Sochi en una primera cumbre tripartita entre Putin y los presidentes de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, y de Irán, Hassan Rohani.
Rusia es junto con Irán uno de los principales aliados militares del Gobierno de Damasco en la guerra civil. Turquía apoya a la oposición y está en contra de Al-Assad, pero en la actualidad trabaja con Moscú y con Teherán para garantizar un alto al fuego amplio y duradero en el país vecino.
Putin tiene previsto, además hablar por teléfono este martes con el Presidente estadounidense, Donald Trump, para abordar asimismo la crisis en Siria, según la agencia Interfax.
Al-Assad sale de Siria sólo en contadas ocasiones. En octubre de 2015 se reunió ya en Moscú con Putin. Según las imágenes difundidas por la televisión rusa, ambos mandatarios se dieron un abrazo en Sochi.
De acuerdo la oficina presidencial siria, Al-Assad declaró que la guerra contra el terrorismo ha conseguido importantes objetivos humanitarios, militares y políticos. Muchas regiones vuelven a ser seguras. Agradeció además a los soldados rusos y dijo sentirse muy feliz de que estén en territorio sirio.
