SANTIAGO.- La ex Presidenta de Argentina Cristina Fernández calificó como un "disparate jurídico" la decisión del juez Claudio Bonadio de pedir su desafuero y detención, en el marco de la investigación por el atentado a la mutual judía AMIA de 1994, acusándola de traición a la patria y encubrimiento.
"Es una causa inventada sobre hechos que no existieron y un juzgamiento de política exterior. Desde el punto de vista jurídico, todo esto que está sucediendo es un despropósito, un verdadero exceso", dijo la actual senadora en una conferencia de prensa en el Congreso.
En este sentido, la ex Mandataria recalcó que "estas medidas no solamente violan, sino que además buscan provocar daño personal y político a los opositores, a sus trayectorias, a sus ideas. No tienen nada que ver con la justicia ni con la democracia".
"No hay causa, no hay delito, no hay motivos. Se juzgó y no hay causa. Bonadio lo sabe, el Gobierno lo sabe, el Presidente (Mauricio) Macri también lo sabe", agregó.
De esta forma, consultada por si recurrirá a organismos y tribunales internacionales, Fernández indicó que "probablemente", añadiendo que podría hacerlo considerando que lo que se está cuestionando por la justicia es el memorándum de entendimiento firmado en 2013 con Irán, sobre el cual habría ocurrido una negociación "paralela" para encubrir a los autores del atentado que dejó 85 muertos.
"Además de ser un disparate jurídico, estamos ante un hecho de política exterior, pero estamos también hablando de situaciones o hechos que se producen en un marco jurídico internacional, como lo es la Carta de San Francisco, y como lo es fundamentalmente también la Carta de las Naciones Unidas, que determina que los miembros que la integran, cuando tengan diferencias entre ellos, deben resolver las cuestiones de acuerdo a las normas que tienen", indicó.
Críticas a Macri y Bonadío
En su alocución, la ex gobernante explicó que en este procesamiento, el juez Bonadio sostiene que los dos atentados terroristas ocurridos en la embajada de Israel y en la AMIA, "son actos de guerra, no son atentados terroristas, porque es la única manera que encontró en su mundo jurídico muy particular para poder traer de los pelos la figura de traición a la patria, la que solamente puede producirse con motivo de que nuestro país se encuentre en guerra".
"Nos acusan, me acusan de traición a la patria, una acusación sin fundamento que además es un insulto a la inteligencia de los argentinos. No creo, sinceramente, que los argentinos, más allá de la valoración que tengan de nuestras políticas, puedan creernos capaces de traicionar a la patria", afirmó.
En este sentido, insistió en que todo esto se trata de una maniobra política orquestada por el propio Presidente Mauricio Macri, acusándolo de ser "el máximo y verdadero responsable de una organización política y judicial para perseguir a la oposición".
"Quiero denunciar que esta es una gran cortina de humo que pretende cuatro acciones fundamentales (...) Creo que quieren intimidar, asustar, tapar y provocar, porque esto tiene una maniobra clara de provocación. Creo que quieren provocar una reacción política", enfatizó.
De esta forma, afirmó que esta acusación en su contra "está directamente vinculada con mi asunción como senadora y justamente con el papel que puedo desarrollar en el Senado".