SANTIAGO.- Pedro Pablo Kuczynski no lo está pasando bien. El Presidente peruano se encuentra en medio de una de las peores crisis políticas que ha debido enfrentar en su carrera, luego de que se revelara que empresas de asesoría a las que está vinculado recibieron millonarios pagos de la constructora brasileña Odebrecht.
La empresa brasileña, acusada de corrupción y de pagar coimas en varios países de América Latina a cambio de beneficios en concesiones, informó esta semana al Congreso peruano que pagó 4,8 millones de dólares a dos firmas vinculadas a Kuczysnki.
Una de ellas, Westfield Capital, recibió 782.000 dólares entre 2004 y 2007, incluyendo 60.000 dólares en los años en que Kuczynski fue ministro de Economía y primer ministro del ex Presidente Alejandro Toledo.
"Estoy aquí para decirles que
no voy a abdicar ni a mi honor, ni a mis valores, ni a mis responsabilidades como Presidente de todos los peruanos", dijo el Mandatario ayer, rodeado de la mayoría de su gabinete en Palacio de Gobierno.
Sus declaraciones llegaron luego de que recibiera múltiples presiones desde el Congreso, de mayoría opositora y liderado por el fujimorista Fuerza Popular, para que diera un paso al costado.
"Soy un hombre honesto y lo he sido toda mi vida, estoy dispuesto a defender la verdad ante la comisión (investigadora del Congreso) Lava Jato, ante la fiscalía, a la que le voy a pedir el levantamiento de mi secreto bancario (...) revisen todo lo que quieran", agregó el jefe de Estado.
Sin embargo, al descartarse su renuncia inmediata, algunos partidos apelan a promover una moción de vacancia, que implicaría promover la salida del Mandatario por vía legislativa. A continuación te contamos más sobre esta instancia y lo que podría venir para el Presidente Kuczysnki.
La vacancia
La vacancia implica la salida del máximo líder de Perú del poder. Esta instancia puede producirse por múltiples motivos, como la muerte del jefe de Estado, su renuncia, su salida del país sin autorización del Congreso o regresar a él después del plazo fijado. Sin embargo, también puede existir una moción de vacancia en caso de que el Legislativo considere que el Presidente mantiene una "permanente incapacidad moral o física" para desempeñarse en el cargo o que existe una infracción que motive su destitución.
Este último aspecto, según establece la Constitución, se produce cuando el Mandatario es considerado culpable "por traición a la patria; por impedir las elecciones presidenciales, parlamentarias, regionales o municipales; por disolver el Congreso, salvo en los casos previstos en el artículo 134 de la Constitución, y por impedir su reunión o funcionamiento, o los del Jurado Nacional de Elecciones y otros organismos del sistema electoral".
Cómo es el proceso
La moción de vacancia solo puede ser impulsada por el Congreso y requiere de la firma de al menos 26 de los 130 legisladores para poder ser presentada al pleno. Según consigna el diario peruano El Comercio, en caso de cumplir con dicho requisito la iniciativa debe ser admitida, para lo cual necesita 52 votos a favor. Por último, si se logra dicho respaldo, la medida será aprobada solo si cuenta con 87 apoyos legislativos. Los pasos anteriores deben ser llevados a cabo en un plazo no mayor a dos semanas.
87 de los 130 legisladores deberán apoyar la moción para aprobarla
En el caso de Kuczynski, Fuerza Popular, liderado por la ex candidata presidencial Keiko Fujimori, tiene 72 asientos; Frente Amplio, también oposición, diez y APRA, del ex Presidente Alan García, cinco. Es decir, justo los 87 votos.
Quién asume si sale el Presidente
Si se concreta una eventual vacancia presidencial, por cualquiera de los motivos esgrimidos, el vicepresidente es quien debe quedar a cargo del Gobierno. En este caso sería Martín Vizcarra quien tendría que asumir de forma inmediata el cargo de Kuczynski.
Si éste, por cualquier razón, no puede cumplir con dicho mandato, será el segundo vicepresidente quien tomará el timón del Ejecutivo. Hoy, la actual presidenta del Consejo de Ministros, Mercedes Aráoz, asumiría como Jefa del Estado. Si ello no es posible, el cargo queda en manos del presidente del Congreso, hoy Luis Galarreta, quien tendría la obligación de convocar a nuevas elecciones.