CARACAS.- El presidente venezolano, Nicolás Maduro, advirtió este viernes que sería "peor" para la oposición abandonar las negociaciones con su gobierno que mantenerse en ellas y advirtió que, si eso ocurre, él continuaría con sus planes.
"Ayer recibieron la orden del imperialismo y de la derecha mundial de que no se sentaran a dialogar, peor para ustedes, porque a nosotros no nos va a detener nadie", expresó el Mandatario en un acto en el palacio presidencial de Miraflores.
Maduro dijo estar listo para firmar un "preacuerdo" propuesto por los cancilleres acompañantes de las conversaciones, que aún se encuentra en discusión.
"Estoy listo para firmarlo y cumplirlo, pero si ustedes no quieren firmarlo, yo seguiré adelante y nada ni nadie nos va a detener. Llamo al pueblo al combate", amenazó.
La cuarta ronda de conversaciones entre el gobierno de Maduro y la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) estaba fijada para estos jueves y viernes en Santo Domingo, pero la oposición se marginó por la ausencia de los cancilleres de Chile y México, sus invitados como facilitadores.
Los delegados de la MUD se ausentaron también en reacción a insinuaciones del gobierno venezolano de que sus negociadores delataron al piloto Óscar Pérez, un ex policía que se rebeló contra Maduro en 2017 y que el pasado lunes murió a manos de las autoridades en un operativo para capturarlo.
La delegación del gobierno sí acudió a Dominicana el jueves, y sostuvo encuentros con el canciller de ese país, Miguel Vargas; con el ex jefe de gobierno de España, José Luis Rodríguez Zapatero, y con los cancilleres de Nicaragua y Bolivia, a quienes propuso como acompañantes.
Vargas aseguró este viernes que la "continuidad del diálogo" estaba garantizada y que se estaba coordinando una fecha para convocar a una nueva reunión.
El principal negociador oficialista, el ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez, acusó a la oposición de recurrir a "excusas fútiles" para paralizar los diálogos y "boicotear" las elecciones presidenciales de este año, en los que el gobernante socialista aspira a revalidar su mandato.