HELSINKI.- Los finlandeses están convocados a concurrir este domingo a las urnas para elegir a su próximo presidente. Unos comicios a los cuales el conservador y actual jefe de Estado, Sauli Niinistö, llega como el gran favorito y con posibilidad de convertirse, incluso, en el primer Mandatario en ser electo en primera vuelta.
Además de representar al país ante el mundo y liderar las Fuerzas Armadas, el jefe de Estado finlandés dirige la política exterior y de seguridad de acuerdo con el Gobierno y el Parlamento, pero no tiene competencias en cuestiones internas como la economía y las políticas sociales. Dichas labores son entregadas al primer ministro, quien se desempeña como el jefe del Gobierno finlandés y es elegido por los parlamentarios.
Niinistö, de 69 años y aspirante independiente, ha liderado todas las encuestas desde el inicio de la campaña electoral. Los sondeos pronostican el retroceso de la extrema derecha y dan al actual Mandatario una ventaja abrumadora con más apoyos que sus siete rivales juntos. Sin embargo, aún no es seguro que pueda lograr evitar el balotaje fijado para el próximo 11 de febrero.
El favorito
Niinistö, ex líder del partido conservador Kokoomus y antiguo ministro de Finanzas, decidió concurrir a estas elecciones como independiente en un intento de destacar su carácter de hombre de Estado y distanciarse de todas las ideologías partidistas. De todas formas, su partido decidió no presentar un candidato propio y lo respaldó públicamente.
58% de las intenciones de voto las obtiene Niinistö, según los últimos sondeos
Hace seis años se convirtió en el
primer presidente conservador desde 1956 y su labor durante su primer mandato es considerada positiva por tres de cada cuatro finlandeses. Para presentarse como independiente en estos comicios, debía recolectar al menos 20.000 firmas. Y no tuvo problemas: logró reunir hasta 156.000 apoyos que validaron su candidatura.
No obstante, su popularidad ha disminuido en los últimos meses y logra superar por poco el 50% de los votos que necesita para salir electo de una vez este domingo. La encuesta más reciente, publicada el jueves en el diario "Helsingin Sanomat", otorga al actual Presidente un 58% de la intención de voto, muy por debajo del 75% que obtenía hace solo un mes. Los otros siete candidatos oscilan entre el 2 y el 14 por ciento.
Los otros contendientes
En caso de no lograr la mayoría absoluta este domingo, el candidato con más opciones de disputar a Niinistö la Presidencia en la segunda vuelta es el diputado ecologista Pekka Haavisto, a quien las encuestas otorgan un 14% de los votos. Ambos se enfrentaron también en la segunda vuelta de las presidenciales de 2012, cuando Niinistö se impuso con el 62,6%, la victoria más abultada desde que en 1994 se instauró en este país el sufragio universal para elegir al jefe del Estado.
Los sondeos confirman, asimismo, el fuerte retroceso del populismo de la extrema derecha, agravado por la escisión en dos grupos del partido ultraconservador, Verdaderos Finlandeses, hasta entonces la segunda fuerza del país. La separación se produjo en junio pasado, luego de que en abril de 2017 la agrupación de tendencia xenófoba obtuviera un desastroso resultado en los comicios municipales, considerado el peor en casi una década.
En esta ocasión, la candidata presidencial de los Verdaderos Finlandeses, Laura Huhtasaari, no ha logrado convencer al electorado con su discurso antieuropeo, por lo que apenas suma el 6% de la intención de voto, según las últimas encuestas. La cifra es especialmente baja si se compara con los resultados del conglomerado en las parlamentarias de 2015, cuando obtuvieron 17,6%, y que Futuro Azul, el partido surgido tras la escisión, no ha presentado un candidato propio.
Las cartas están echadas sobre la mesa y Niinistö sería el gran ganador. Solo queda esperar si será investido luego de este domingo o deberá volver a enfrentarse a las urnas en dos semanas más.
