CARACAS.- El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, aseguró hoy que desde los Estados Unidos se presiona a la delegación opositora en los diálogos en República Dominicana para que rechace el "acuerdo de paz" que busca una salida a la crisis en el país, una afirmación que sustentó en pruebas que no facilitó.
Estas declaraciones las dio a la media tarde, cuando las dos delegaciones en Santo Domingo ya llevaban horas negociando en una cuarta ronda de encuentros que se espera que sean los definitivos en los puntos que se discuten, y que abarcan desde la fecha de las elecciones hasta la petición de retirada de sanciones contra miembros del Gobierno.
"A esta hora hay una presión inaudita del Departamento de Estado de los EE.UU. para destruir los diálogos de paz de República Dominicana", aseguró Maduro en una alocución televisada en cadena obligatoria de radio y TV desde el Palacio presidencial de Miraflores.
"Tengo pruebas concretas de cómo el Departamento de Estado de los EE.UU. está presionando a toda la oposición venezolana para que no firme el acuerdo conversado y preacordado hace más de una semana", añadió.
El jefe del Ejecutivo reiteró una información que reveló hace unos días, y aseguró que las presiones, que dice vienen desde Washington, buscan "sabotear el proceso electoral de Venezuela" que, según decretó la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), órgano plenipotenciario y solo compuesto por chavistas, tienen que celebrarse antes de mayo.
Frente a esta situación indicó que ordenó al jefe de los chavistas en Santo Domingo, el ministro de Comunicación Jorge Rodríguez, "para que persevere en la voluntad" de negociación y se logre el acuerdo "que tanto aspiran las mayorías".
Rodríguez señaló a la entrada de la sede de la cancillería dominicana, sede de los encuentros, que de la reunión de hoy "debe de salir algo bueno" y que se encontraban hablando sobre "los detalles" del acuerdo.
Agradeció además a los opositores que decidieron acudir a este encuentro "a pesar de la profunda presión a la que ha sido sometida".
De los cuatro grandes partidos opositores que participan en los diálogos, Voluntad Popular (VP), del encarcelado Leopoldo López, decidió no acudir a la cita de hoy por, entre otros motivos, el adelanto de las presidenciales decretado por la ANC.
La Mesa de la Unidad Democrática (MUD), coalición a la que pertenecen las cuatro bancadas, anunció, el mismo día de la decisión de VP, que sí viajaría a la vecina isla caribeña "a exigir las garantías electorales que permitan unas elecciones justas y así propiciar un cambio".
La MUD pidió entonces "confianza" a los venezolanos ante un encuentro que consideran "una oportunidad definitiva para que el Gobierno revise sus recientes decisiones, y de esa manera evite que el país entre en caos inmanejable".