WASHINGTON.- La Casa Blanca responsabilizó el jueves a Rusia por el ciberataque de 2017 "NotPetya" y amenazó a Moscú con que enfrentará "consecuencias internacionales".
Llevado a cabo en junio pasado por militares rusos, "fue el ciberataque más destructivo y costoso de la historia", subrayó la presidencia estadounidense en un comunicado. Moscú ha negado sin embargo realizar el ataque.
NotPetya "se expandió rápidamente en el mundo, provocando miles de millones de dólares de pérdidas en Europa, Asia y América", detalló la Casa Blanca en un comunicado.
Según Washington, este ciberataque "formaba parte del actual esfuerzo del Kremlin para desestabilizar a Ucrania y muestra de manera todavía más clara la implicación de Rusia en el conflicto en curso".
El Reino Unido apuntó el jueves contra Moscú y en particular contra sus militares por el ciberataque NotPetya, acusaciones "categóricamente" desmentidas por el Kremlin.
Iniciado en Ucrania y en Rusia y propagado luego al mundo entero, el ataque informático (ransomware, exigencia de pago de rescate para desbloquear un sistema) contaminó miles de computadores en junio de 2017.
Principalmente perturbó a empresas transnacionales e infraestructuras vitales, como controles en el sitio del accidente nuclear Chernobyl y los puertos de Bombay y Amsterdam.
En Ucrania, el país más afectado, en guerra contra rebeldes separatistas pro-rusos, las operaciones bancarias fueron afectadas, así como las pantallas de información del principal aeropuerto.