SANTIAGO.- La semana pasada Voluntad Popular, partido opositor de Venezuela, anunció que no participará de las elecciones presidenciales del 22 de abril. Opción a la que fue respaldada por otras colectividades y a la que hoy se sumó la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), coalición que reúne la mayor cantidad de partidos opositores.
Su postura se debe a que
acusan una falta de garantías para ser parte de este proceso, como auditorías, la observación internacional y el respeto de los plazos electorales. Así, la decisión de los partidos aumenta las tensiones políticas y podría profundizar la crisis que enfrenta el país.
Emol conversó con distintos analistas para revisar la situación de los partidos de oposición en Venezuela y su futuro al no participar en los próximos comicios.
Una oposición fragmentada
"La oposición no solamente está debilitada, sino que no tiene un criterio mínimo de enfrentamiento al oficialismo, que aun cuando tiene un descrédito muy alto, se impone, precisamente por la falta de unidad y de criterio de la oposición", explicó Gilberto Aranda, académico de estudios internacionales de la Universidad de Chile.
Aranda afirmó que aunque veía complicada la situación del Gobierno durante el año 2016 y la primera parte de 2017, el Presidente Nicolás Maduro "a través de la recuperación de la iniciativa política, ha ido arrinconando, quebrando, fragmentando la oposición que no se pone de acuerdo".
"(Maduro) ha ido arrinconando, quebrando, fragmentando la oposición que no se pone de acuerdo".
Gilberto Aranda
Además, señaló que al decidir restarse de participar en el proceso electoral, el futuro de la resistencia venezolana volvería a enfocarse en la manifestación en la calle, "que durante gran parte del 2016 intentó y no rindió frutos".
Según el historiador y analista internacional de la Universidad San Sebastián, Patricio Gajardo, "la oposición debe lograr una cohesión para enfrentar no el proceso electoral, pero sí enfrentar al chavismo. El gol ha sido del chavismo y de Maduro ciertamente, que están manejando la situación y aislando a la oposición".
Las elecciones
Respecto a la polémica por las elecciones presidenciales de abril próximo, Lucía Dammert, académica de la Universidad de Santiago aseguró que no es una situación nueva. "No es la primera vez que la oposición decide no participar y finalmente lo que sucede es que el régimen se fortalece", explicó y añadió que la definición del Gobierno del proceso electoral dificultó la participación de estos partidos.
El analista Patricio Gajardo afirmó que en los comicios "a la oposición lo único que se le está pidiendo es ser un ente de legitimación de un proceso que va a otorgarle el poder a Nicolás Maduro y va a construir de facto también una dictadura absolutamente uniforme".
En ese sentido, según Gajardo, para las colectividades existían dos opciones. Por un lado, participar e intentar generar divisiones internas dentro del chavismo o restarse, como lo hicieron, pero el experto calificó ambos escenarios como negativos.
Por su parte, Aranda enfatizó que "el Gobierno hizo suyo el cronograma electoral y precisamente cuando observa que la oposición está más débil y menos unida es que llama a elecciones, no cuando todos están en la calle y están más o menos de acuerdo",
Además, agregó que "desde el punto de vista de la preservación del poder, el Gobierno ha sido eficaz este último año".
La académica de la Universidad de Santiago, en tanto, indicó que la oposición venezolana "no logra encontrar puentes comunes entre los múltiples actores que hay y eso le pasa la cuenta" y añadió que para participar en un próximo proceso electoral deberá "poner todo tipo de diferencias de lado y buscar un mecanismo de unificación que los permita volver a las urnas".
